Mons. Cristóbal Ascencio García, Obispo de Apatzingán, en el estado mexicano de Michoacán, suspendió "de manera indefinida" al P. Gregorio López Gerónimo, conocido como "Padre Goyo" y considerado uno de los iniciadores de las autodefensas locales.
En un comunicado publicado el 20 de julio, Mons. Ascencio García señaló que la suspensión es por "las faltas repetitivas y graves dentro y fuera de la diócesis en la administración de los sacramentos, faltas graves que han ocasionado serios problemas en la comunidad eclesial y que también han sido faltas a la dignidad de los sacramentos".
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El P. López Gerónimo, considerado uno de los iniciadores de las autodefensas del municipio de Apatzingán, grupo armado que combatió a cárteles del narcotráfico, dijo al diario mexicano El Universal que apelará la sanción del Obispo, pero que "aunque la decisión tiene otro trasfondo, de buena gana por ser la legítima autoridad que la Santa Iglesia nos ha impuesto".
"He sido rebelde, desobediente, no me he sometido, y ahí me faltaba aplaudir más, en vez de disentir, y es por eso que no he sido sumiso", añadió el sacerdote, conocido también por su trabajo social en la región.
En su comunicado, Mons. Ascencio García dijo que "sabemos y reconocemos el mucho bien que ha hecho" el P. López Gerónimo, pero subrayó que "debo cuidar de que las funciones sagradas se celebren en las iglesias o en los lugares propios para la celebración misma, de acuerdo con las normas litúrgicas, lo cual exige bastante más que la simple vigilancia para evitar abusos".
La suspensión "del ejercicio ordinario de la potestad de orden" es efectiva desde el 20 de julio, y, según explicó el Obispo de Apatzingán, el P. López Gerónimo "de ahora en adelante no podrá celebrar ningún sacramento, ni acto que tenga que ver con la investidura eclesiástica".