Católicos latinoamericanos se reunieron en Roma para rezar por los fallecidos y los enfermos del coronavirus, COVID-19.
La vigilia de oración se realizó en la Basílica de San Bartolomé localizada en la isla tiberina el jueves 9 de julio y participaron representantes de al menos 9 países de América Latina: Perú, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Guatemala, Brasil, México, Ecuador y Chile.
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La oración fue presidida por un sacerdote que nació en El Salvador, P. Francisco Guevara, quien forma parte de la Comunidad de San Egidio.
En esta línea, Ugo Cianetti, responsable del servicio que San Egidio realiza con los migrantes latinoamericanos, destacó a ACI Prensa que la Comunidad "tiene en el corazón a Latinoamérica desde hace muchos años" y, de hecho, está presente en todos los países que fueron representados en el citado momento de oración.
"En la Comunidad de San Egidio estamos trabajando a favor de los más pobres en Latinoamérica, estamos proporcionando alimentos, medicinas, mascarillas y gel antibacterial para colaborar en la prevención de los contagios del COVID-19", indicó Cianetti.
Además, el responsable en Italia del servicio con los migrantes latinoamericanos de la Comunidad de San Egidio explicó a ACI Prensa "estamos recibiendo noticias de lo que está sucediendo allá, de los muchos fallecidos, y del aumento de la pobreza, porque muchos de ellos viven del trabajo informal, por lo que han perdido su empleo".
Por ello, Ugo Cianetti dijo que les pareció bueno organizar un momento "para rezar por los fallecidos y por los enfermos de coronavirus en América Latina" y añadió que "las personas presentes han querido participar porque creen que el Señor puede proteger y cuidar la vida de sus seres queridos".
De hecho, durante la oración, "cada uno de ellos escribió en unas papeletas los nombres de las personas queridas que están enfermos o que fallecieron, y los nombre fueron recogidos y colocados delante de una imagen de Jesús".
"Sabemos que la oración es el arma más potente del cristiano y que salvará la vida de cada uno de nosotros", concluyó el organizador de este momento de oración.