Al recibir esta mañana al Presidente del gobierno español, José María Aznar, el Papa Juan Pablo II  destacó nuevamente las profundas raíces cristianas de España.

En su breve saludo al Presidente Aznar, el Papa manifestó su alegría por poder recibirle junto con su familia, siendo ésta la última visita como presidente del gobierno tras ocho años de mandato.

“En este periodo –añadió el Pontífice- hemos tenido oportunidad de encontrarnos en diversas ocasiones, la ultima de las cuales durante mi quinto Viaje Apostólico a España el pasado mes de mayo”.

En esa memorable ocasión pude constatar, una vez más, las profundas raíces cristianas del pueblo español y el dinamismo de la Iglesia en su noble País. Esas dos cualidades han marcado los momentos más brillantes de su historia, y con ellas las nuevas generaciones podrán encaminarse hacia un futuro cada vez más prometedor”.

Finalmente, el Papa renovó sus votos “por el progreso espiritual y material de los españoles, por su convivencia pacifica en concordia y libertad, a la vez que invoco del Altísimo toda clase de bendiciones sobre los amadísimos hijos e hijas de España”.

Previamente, Aznar y el Papa hablaron durante 16 minutos en privado. Según una nota de prensa oficial, “en una conversación muy cordial, el Papa y el presidente Aznar han hablado de Europa. El Santo Padre ha manifestado su aprecio por la posición del presidente del gobierno español, en particular acerca de la cuestión del reconocimiento de las raíces históricas cristianas de Europa”.

El coloquio se ha ampliado después a los temas de la situación actual en el mundo, sobre todo en el área mediterránea y de Oriente Medio”, agrega la nota.

Encuentro en familia

Aznar llegó al Vaticano acompañado de su esposa, Ana Botella, sus hijos Ana y Alonso y su yerno, Alejandro Agag, así como por el embajador español ante la Santa Sede, Carlos Abella, y su esposa, y varios colaboradores políticos como el secretario general de la Presidencia del Gobierno, Javier Zarzalejos.

Tras la reunión a solas, el Papa y Aznar  se reunieron con los familiares  y colaboradores del jefe del Ejecutivo y a los que saludó uno a uno el Pontífice.

En el momento en que su hija Ana besaba el anillo al Papa, Aznar comentó al Papa que está embarazada y que espera un hijo para la próxima primavera.

Aznar regaló al Pontífice un libro de 1611 con las obras completas de Santa Teresa de Jesús, mientras que Juan Pablo II le obsequió con una fotografía suya enmarcada en plata y con una dedicatoria personal, así como con un estuche con los misterios del rosario en plata.

Condecoración a Ana Botella

Durante el posterior encuentro con el Secretario de Estado, el cardenal Angelo

Dama de la Orden de Pío IX