Lila Rose, líder provida estadounidense y fundadora de la plataforma Live Action, denunció el sesgo abortista de las redes sociales Twitter, Facebook, Youtube y Pinterest

"@Facebook usó abortistas para verificar los datos (fact-check) y eliminar a Live Action y el alcance de mi página. @Pinterest nos ha censurado por 'efectos negativos en la seguridad pública', @Twitter nos ha prohibido publicar avisos a menos que eliminemos de nuestro sitio todos los ultrasonidos (ecografías) y @Youtube ha sacado nuestros videos encubiertos", escribió Rose el 28 de mayo en su cuenta de Twitter.

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"Estas grandes empresas tecnológicas no son plataformas neutrales: son editoriales partidistas y bajo la protección de la sección 230 son actualmente inmunes de prácticamente cualquier responsabilidad por su censura y manipulación de la conversación. Algo tiene que cambiar. Ahora. RT si estás de acuerdo", agregó.

En septiembre de 2019 Rose denunció que Facebook censuró una publicación suya calificándola de "noticias falsas", solo por decir que el aborto nunca es médicamente necesario.

En aquella oportunidad también dijo que "Facebook está usando a dos abortistas que lucran con acabar las vidas de niños no nacidos para vender reclamos falsos sobre mí y limitar que el contenido de Live Action llegue a los millones que nos siguen". "Esta es la censura tecnológica más flagrante que hemos enfrentado hasta ahora", aseguró.

Los dos médicos abortistas a los que hizo referencia son Daniel Grossman, que se presenta como director de Advancing New Standards in Reproductive Health (ANSIRH) y que defiende argumentos como que "el aborto es seguro, incluso más seguro que dar a luz"; y Robyn Schickler, que se define como "una gineco-obstetra que provee servicio de aborto como parte del espectro completo del servicio de salud reproductiva".

Marck Zuckerberg, fundador de Facebook, dijo el 20 de septiembre que su compañía se equivocó al censurar a Live Action y a Lila Rose, y admitió un "claro sesgo" en cuanto a la "verificación de datos".

En junio de 2019, Rose denunció que Pinterest suspendió permanentemente la cuenta de Live Action "debido a que su contenido es contrario a nuestras políticas de desinformación". "Creo que Pinterest ha ido en contra de Live Action porque nuestro mensaje es muy efectivo para educar a millones sobre la humanidad de los niños por nacer y la injusticia del aborto", agregó.

Los usuarios de Pinterest, dijo entonces la líder provida, "merecen saber la verdad de nuestros mensajes y merecen ser tratados con justicia. Si Planned Parenthood puede promover su mensaje (abortista) en Pinterest, entonces Live Action también debería poder hacerlo".

En septiembre de 2018, Lila Rose publicó en USA Today un artículo titulado "Twitter asegura neutralidad política, pero mi organización sufre el sesgo de primera mano", en el que denunció que "Planned Parenthood y los grupos abortistas muestran publicidad libremente, mientras que los anuncios provida son marcados como 'ofensivos'. Ese doble estándar es algo que debe preocuparnos a todos".

Carlos Polo, director de la Oficina de América Latina del Population Research Institute (PRI) dijo a ACI Prensa que "el caso de Lila Rose es uno de los tantos en que Facebook y otras redes sociales imponen una censura ideológica y política".

"Si no opinas como ellos, desaparecen tu opinión como primer aviso y luego si no te sometes, te desaparecen totalmente. Y ni siquiera se toman la molestia de explicarte por qué te borraron el contenido o cancelaron tu cuenta. Es una verdadera dictadura cibernética", alertó.

Polo señaló además que "Facebook ha creado un equipo de verificadores (fact checkers) bajo el discurso de prevenir las noticias falsas o fake news, pero resulta que ya se han dado casos en que estos 'fact checkers' son personas con una posición ideológica y política que califican de 'falso' aquellas opiniones o hechos que no comparten. Y no pocas veces estos verificadores son los verdaderos fake news".

Hace unos días diversos activistas provida en Estados Unidos aseguraron que la anunciada junta de supervisión independiente creada por Facebook genera una serie de dudas sobre la libertad de expresión, la ideología de género y la promoción del aborto en la red social.  

Orden ejecutiva del presidente Donald Trump

Lila Rose publicó su tuit en el que denunció el sesgo abortista de las redes sociales el 28 de mayo, el mismo día que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó la Orden Ejecutiva para prevenir la censura en línea, en la que pide a las agencias federales revisar la sección 230 de la Ley de Decencia en las Comunicaciones que da inmunidad a las redes sociales.

La orden siguió a una disputa de Trump con Twitter, que marcó dos de sus tuits como portadores de información dudosa y recomendaba a los usuarios buscar información adicional. Los tuits del presidente se referían a la posibilidad de fraude en el voto por correo para las próximas elecciones, una medida que podría tomarse ante la emergencia del coronavirus.

La orden ejecutiva señala, entre otras cosas, que "en un país que atesora desde hace mucho la libertad de expresión, no podemos permitir que un número limitado de plataformas en línea escoja a mano lo que los estadounidenses pueden ver o no en Internet. Esta práctica es fundamentalmente no estadounidense y antidemocrática".

"Cuando grandes y poderosas empresas de redes sociales censuran opiniones con las que no están de acuerdo, ejercitan un poder peligroso. Dejan de funcionar como una pizarra de anuncios y deben ser vistas y tratadas como creadores de contenido", agrega.

Trump también afirma que "las plataformas en línea están realizando una censura selectiva que daña nuestro discurso nacional. Decenas de miles de estadounidenses han denunciado, entre otras conductas problemáticas, que las plataformas online 'marcan' contenidos como inapropiados, pese a que no violan ningún término de servicio".

Estas plataformas, prosigue, también "hacen cambios no anunciados en las políticas que tienen el efecto de desfavorecer algunos puntos de vista y borran contenido y cuentas enteras sin avisar, sin una razón fundamental y sin posibilidad a reclamar".

Como nación, resalta la orden, "tenemos que promover y proteger los distintos puntos de vista en el ambiente de las comunicaciones digitales donde todos los estadounidenses deben tener voz. Debemos buscar la transparencia y la responsabilidad de parte de las plataformas en línea, y alentar estándares y herramientas y preservar la integridad y apertura del discurso estadounidense y la libertad de expresión".

La orden ejecutiva establece que en un lapso de 60 días el Secretario de Comercio, tras haber consultado con el Fiscal General y actuando a través de la Administración Nacional de Telecomunicaciones e Información (NTIA), presentará una solicitud de reglamentación ante el Gobierno Federal.