Las mujeres que integran la organización Pro-Vida, descartaron que Carmen Argibay, la polémica candidata a magistrada de la Corte Suprema que se confesó atea militante y abortista, represente a la mujer argentina.
María Laura Garmendia, secretaria de Pro-Vida, declaró a nombre de su organización que si el Presidente Néstor Kirchner, “cree que la mujer argentina puede estar representada por una mujer soltera de 64 años, sin hijos, que no ha formado una familia, partidaria del aborto, que se reconoce de izquierda y atea militante, tiene una idea totalmente deformada de los valores y principios de la inmensa mayoría de las mujeres argentinas”.
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Garmendia advirtió que “el jacobinismo ya le ha hecho mucho daño al país. La doctora Argibay ha declarado que los que no piensan como ella son retrógrados. Obviamente, viene deliberadamente a dividir y enfrentar, resultando totalmente ajena a la mesura y prudencia que debe tener un ministro de la Corte Suprema”:
90 por ciento de población católica