El Papa Francisco llamó por teléfono al Patriarca Copto Ortodoxo de Egipto, Tawadros II, el pasado 10 de mayo para renovar la promesa de oración diario recíproca que, en el actual contexto de pandemia de coronavirus, se presenta más necesaria que nunca.
La llamada del Romano Pontífice al Patriarca de los coptos ortodoxos, al que le une una estrecha amistad, se produjo para conmemorar la visita que el Papa Pablo VI realizó al Patriarca Shenouda III en el año 1973.
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Aquella visita fue la primera que un Pontífice realizaba al Patriarca copto y supuso un evento histórico en el proceso de diálogo ecuménico. Para recordar ese evento, en el año 2013, durante una visita de Tawadros II al Vaticano, se instituyó el 10 de mayo la Jornada del amor fraterno entre coptos y católicos.
Durante la llamada, según informa la Agencia Fides, el Papa Francisco expresó su proximidad a la Iglesia copta y a Egipto y a los egipcios. Ambos líderes religiosos analizaron la actual situación de emergencia sanitaria y rezaron juntos pidiendo a Dios que se apiade de la Iglesia, de los creyentes y del mundo entero.
Asimismo, hablaron sobre la necesidad de buscar una fecha común a todos los cristianos para que católicos, ortodoxos, luteranos y de otras confesiones puedan celebrar juntos la Pascua, que actualmente se celebra en fechas diferentes en función de cada rito.
