La Comisión de Relaciones Laborales de la República de Irlanda determinó que una escuela católica discriminó a un niño ateo cuando sus estudiantes fueron recompensados por asistir a una ceremonia religiosa.
La comisión, un foro independiente, casi judicial, dictaminó que la Escuela Nacional Yellow Furze, en el condado de Meath, había discriminado a un estudiante ateo.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
A principios del año escolar 2019, se les había prometido a los estudiantes que se les liberaría de tarea si participaban en el coro durante una ceremonia de Primera Comunión.
La madre del niño se quejó, pero la escuela defendió su política.
"Cualquier estudiante, independientemente de su religión en nuestra escuela que optó por no participar en este evento extracurricular no fue 'recompensado'", dijo la escuela, según el Irish Post el año pasado.
La escuela detalló que los niños de cualquier religión podían participar en el coro, y que el reclamo de discriminación era "totalmente infundado".
La Comisión dijo que la escuela "no considera que esta acción haya tenido un efecto adverso en los estudiantes que no son de fe católica", informó el Irish Times.
La madre dijo que "ese día mi hijo era el único niño en la clase que no participaba. También era el único niño no católico en la clase". Agregó que "salió de la escuela llorando".
"Somos ateos y esta no es una opción que está abierta para él", dijo.
El Irish Post informó en 2019 que el niño era uno de los dos alumnos de su clase –de un total de 33– que recibirían una tarea en lugar de asistir a la ceremonia del coro.
Según la Comisión, los padres del niño estaban "profundamente heridos y molestos" por la escuela.
"Sentimos que la escuela había ignorado el hecho de que tenemos un conjunto diferente de creencias. Sentimos que nuestro hijo había sido señalado y castigado por no ser católico ", dijo la madre a RTE News, y agregó que esperaba que el fallo "cambiara las cosas para los niños que no son católicos aquí".
La madre desde entonces inscribió a su hijo en otra escuela.
La Comisión ordenó a la escuela que pagara cinco mil euros (más de 5.400 dólares) y exigió que la escuela revise sus políticas para que cumpla con las Leyes de Igualdad de Estado. La escuela también tendrá que publicar un memorando de cumplimiento en un lugar notorio dentro de la escuela.
La madre le dijo a RTE News que devolverá los cinco mil euros a la escuela, "porque serán nuestros amigos y vecinos quienes los financiarán, a través de la recaudación de fondos de la escuela. Hemos sido reivindicados, pero sentimos que sería un error aceptar este dinero".
Las escuelas católicas en Irlanda representan el 90% de todas las escuelas primarias del país, informó el Irish Times. Es probable que el fallo afecte la forma en que otras escuelas promueven y organizan eventos religiosos.