Un año después del incendio que destruyó gran parte del techo y la aguja de la Catedral de Notre-Dame de París, un sacerdote francés compartió detalles sobre lo que significa y sigue significando esta joya arquitectónica para los franceses en medio de una crisis mundial.
El P. Pierre Amar dijo a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI– que Notre-Dame es "el mismo ejemplo de la belleza suprema", pero que lamentablemente hoy es "una gran víctima quemada".
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"Notre-Dame es una gran dama de la historia. Ha vivido siglos, épocas, peligros y guerras. Ha sostenido a la nación en sus horas más oscuras. Cuando vimos las llamas asaltando el marco, todos creímos que toda nuestra historia estaba a punto de ceder. Si hubo tal conmoción, fue porque nuestras raíces fueron atacadas", explicó.
Recordó que la catedral ha tocado y resguardado almas durante 850 años en los que se realizaron dentro de sus paredes oraciones, peticiones y alabanzas.
"La catedral es sobre todo el lugar donde se celebra la Misa", reflexionó.
El Arzobispo de París, Mons. Michel Aupetit, veneró el Viernes Santo la reliquia de la Corona de Espinas dentro de la catedral dañada. "Señor Jesús, hace un año, esta catedral en la que estamos, estaba ardiendo, causando asombro y un ímpetu mundial para su reconstrucción, restauración. Hoy estamos en esta catedral medio derrumbada para decir que la vida sigue ahí", rezó.
"El mundo entero es golpeado por una pandemia que propaga la muerte y nos paraliza. Esta corona de espinas fue salvada en la noche del incendio por los bomberos. Es la señal de lo que sufriste por la burla de los hombres. Pero también es la señal magnífica que nos dice que te unes a nosotros en el apogeo de nuestro sufrimiento, que no estamos solos y que siempre estás con nosotros", dijo Mons. Aupetit.
Notre-Dame se incendió el 15 de abril de 2019, en Lunes Santo. Quedó destruida la torre del edificio y la mayor parte del techo. Las bóvedas de piedra sobrevivieron casi intactas, al igual que la mayoría de las obras de arte y reliquias de la catedral.
Las medidas para combatir el coronavirus en Francia han retrasado los esfuerzos de reconstrucción de Notre-Dame de París.
Según el diario francés Libération, la eliminación del andamio derretido en el techo de la catedral programada para el 23 de marzo no puede llevarse a cabo debido a las medidas sanitarias por el COVID-19.
El andamio, que estaba en el edificio antes del incendio debido a unos trabajos de restauración, se fundió durante el siniestro. Se estima que todavía hay 551 toneladas de metal en la parte superior de la catedral.
Después de ver arder la catedral el año pasado, el P. Amar recordó que el Obispo de Nanterre comentó una elocuente frase: "Y de repente Francia recordó que era cristiana".
"¿Por qué el mundo entero lloró por Notre-Dame?", preguntó el sacerdote, y luego respondió: "Porque Notre-Dame nos transmite este sentimiento de lo absoluto; nos da un anticipo de la eternidad".
"Para nombrar a todos los autores y artistas que ella ha inspirado, ¡tendríamos tiempo para reconstruir el marco por nuestra cuenta! Es esta trascendencia la que inspira. Es un vínculo directo con el Creador", agregó.
El sacerdote dijo que la descripción de Víctor Hugo de las 16 campanas de Notre-Dame, incluidas 2 campanas de Bourdon, proporciona una sensación de su poder.
Las campanas de Notre-Dame incluyen una campana de Bourdon de 13 toneladas en la torre sur, que se llamó Jacqueline en el 1400 en honor a la esposa de su donante. Cuando fue refundida en 1686, la campana pasó a llamarse "Emmanuel Louise Therese" por Luis XIV.
El P. Amar que el escultor francés Auguste Rodin afirmó que "frente a las catedrales, las multitudes se detienen en silencio, incapaces de comprender el esplendor de estas inmensidades arquitectónicas, admirando instintivamente". El sacerdote señaló que Notre-Dame de París no es la única catedral en Francia que desempeña este papel.
"¡Cómo no podemos mencionar a Reims, santuario de los reyes de Francia, o Chartres, tierra de peregrinaciones! Pero Notre-Dame tiene la antigüedad: con sus 850 años de historia, se encuentra entre las primeras catedrales góticas de su tiempo", acotó.
"Durante años, Notre-Dame estuvo allí, frente a nosotros, ¡y solo nos tomamos el tiempo para contemplarla en el momento en que cayó la flecha! ¿Por qué siempre se necesitan circunstancias trágicas para despertar al mundo?", preguntó.
Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en CNA.