Farid Matuk, uno de los integrantes del llamado comando de operaciones COVID19 que el gobierno del Perú creó hace unos días para la lucha contra la enfermedad, afirmó que la lucha contra el patriarcado debe esperar al fin de la pandemia del coronavirus.
En diálogo con Canal N el 9 de abril, el ex jefe del Instituto Nacional de Estadística (INEI) afirmó que "debe haber igualdad de género, pero la lucha contra el patriarcado se debió postergar para después de la pandemia".
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Las declaraciones de Matuk se dieron luego de los diversos problemas que generó la decisión del gobierno de permitir la circulación de las personas de acuerdo a su sexo: los hombres pueden salir lunes, miércoles y viernes; y las mujeres los martes, jueves y sábado. Los domingos nadie debe salir de su casa para evitar las aglomeraciones de personas que puedan suscitar el contagio del coronavirus
Tras los problemas vistos en diversos puntos del país, Matuk reconoció que fue idea suya la de permitir la salida de hombres y mujeres en días distintos, una medida que ha sido revocada este Viernes Santo.
"Por un exceso de igualdad me equivoqué. Que por un rechazo al patriarcado dije que debía haber igualdad y que la solución debió ser: cuatro días para mujeres y dos días para hombres", dijo Matuk.
"Es mi error, yo asumo la responsabilidad", reconoció y dijo que actualmente "hay roles asignados a las mujeres que lamentablemente no es el momento de combatirlos pero si se deben combatir".
¿Qué es el patriarcado?
Agustín Laje, coautor del best seller "El Libro Negro de la Nueva Izquierda" y uno de los mayores críticos de la ideología de género en el continente, explica que para quienes defienden la tesis de la existencia del "patriarcado" este es "el sistema de dominación fundamental, vale decir, atraviesa todos los otros tipos de sistemas de dominación".
Dicho de otra forma, "el 'patriarcado' es un sistema estructurado para colocar, de manera inexorable, a la mujer en inferioridad respecto del hombre".
"Las tesis más extremas del 'patriarcado' motorizan el lesbianismo como 'forma de resistencia' pues la heterosexualidad equivaldría a 'dormir con el enemigo'", alerta.
Laje precisa además en un artículo publicado en 2017 que "en verdad, el 'patriarcado' ya no existe en los países occidentales, y ello no gracias a la vocinglera militancia feminista, sino gracias al sistema económico y político que tanto odian las feministas: el capitalismo de libre mercado y la democracia liberal".
"Los datos de la realidad, en efecto, parecen mostrar algo bien distinto de lo que establece el discurso del 'patriarcado': en numerosas dimensiones e indicadores de la vida social, cuidadosamente omitidos por el feminismo, el hombre aparece mayormente perjudicado".
En su artículo "El patriarcado no existe", Laje ofrece además una serie de cifras para sustentar sus afirmaciones, como por ejemplo que, a nivel mundial, el 79% de víctimas de homicidio son hombres, en las guerras históricamente el más perjudicado es el hombre, la esperanza de vida de una mujer es 5 años mayor que la del hombre y; a nivel laboral, hay más niños trabajadores y las tasas de accidentes laborales son "desproporcionadamente desventajosas para los hombres".