En la Misa de instalación como Arzobispo de Puerto Montt, Mons. Fernando Ramos reflexionó sobre la "clave" para caminar como Iglesia arquidiocesana ante la crisis de los abusos sexuales y otros desafíos.
Desde junio de 2018 Mons. Ramos se desempeñó como Administrador Apostólico de Rancagua y en diciembre de 2019 fue nombrado Arzobispo de Puerto Montt, para asumir la sede vacante que administraba con potestad apostólica el P. Ricardo Morales.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
En su homilía, Mons. Ramos manifestó que todos los bautizados "formamos parte de esta gran comunidad que es la Iglesia. Somos parte desde nuestra humanidad y fragilidad, desde nuestros logros y fracasos, grandezas y pequeñeces".
"Todo cuanto podamos hacer al servicio de la evangelización, de la sociedad, de los más pobres y abandonados, no brota de nuestra superioridad moral, ni de nuestras capacidades extraordinarias, ni de nuestras planificaciones magistrales, brota pura y simplemente de la cercanía de Jesús que convierte y transforma nuestra mente, nuestro corazón y modo de pensar. Esta es la clave de nuestro caminar como Iglesia: el encuentro con Jesús nos convierte", reflexionó.
Ese camino también será el que ilumine a la Iglesia ante la grave crisis por los abusos sexuales, de poder y conciencia cometidos por algunos miembros. "Tenemos que seguir permanentemente un camino de conversión".
"En los últimos años, hemos vivido una crisis como Iglesia, tanto a nivel universal como local, producto de muchos casos de abusos cometidos en su seno por personas que han traicionado su consagración al Reino de Dios. El dolor y daño causado en víctimas y sobrevivientes por estos delitos inaceptables es enorme".
"Pero también a las comunidades y a la conciencia de los creyentes, esta situación ha golpeado fuertemente, generando indignación, estupor y tristeza. Todo esto nos avergüenza, interpela y nos impulsa para dar respuestas a estas graves situaciones", sostuvo.
En ese sentido, hay que "reavivar en nosotros un proceso de discernimiento y conversión que nos lleve a responder eficazmente ante los casos que han ocurrido y a construir, mediante la prevención, ambientes sanos y seguros para todos, especialmente los más vulnerables, en todas nuestras comunidades", precisó.
Al finalizar, el Arzobispo de Puerto Montt confió la intercesión y protección de la comunidad arquidiocesana a la Virgen María en la advocación de Nuestra Señora del Carmen, patrona de Chile.
Durante la Misa, el P. Nelson Pérez expresó la alegría de la comunidad por el inicio del ministerio episcopal de Mons. Ramos en tierras sureñas.
"Lo recibimos para caminar juntos y en comunión, ya que queremos seguir siendo piedras vivas de la Iglesia, Iglesia que se hace palabra, gesto, puerta abierta en todas las parroquias, colegios, servicios, proyectos sociales y educativos", agregó.
La Eucaristía fue celebrada el 29 de febrero en el templo del Colegio Inmaculada Concepción y contó con la presencia del Nuncio Apostólico en Chile, Mons. Alberto Ortega; Obispos; autoridades y fieles.
Cabe recordar que, tras el escándalo de los casos de abusos sexuales en Chile, los 34 Obispos chilenos presentaron su renuncia en mayo de 2018.
Entre las primeras renuncias aceptadas por el Papa Francisco estuvo la del entonces Arzobispo de Puerto Montt, Mons. Cristián Caro Cordero. La sede arzobispal quedó vacante y el P. Ricardo Morales Galindo fue designado como Administrador Apostólico.
Por solicitud del P. Morales, en enero de 2019 el Papa Francisco envió al Visitador Apostólico, Mons. Jorge Patrón Wong, Secretario de Seminarios de la Congregación para el Clero.
