Diputados estatales de Río de Janeiro (Brasil) exigieron el retiro de una muestra blasfema donde aparece una imagen de la Virgen María semidesnuda y con un órgano genital masculino, y que está siendo expuesta en un espacio que hace parte del gobierno local.
La exposición blasfema, que indigna a los católicos, está en el Centro Municipal de Arte Hélio Oiticica, espacio de la Secretaría Municipal de Cultura del Municipio de Río de Janeiro.
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Según informa O Globo, el espacio administrado por la Prefectura de Río de Janeiro tiene actualmente dos exposiciones. Una se llama "Cine Deseo" de Carolina Valansia, en la que se muestran imágenes y afiches de cine pornográfico. En la segunda, titulada "Lavra", hay distintas obras experimentales sobre el cuerpo y el trabajo.
Es en esta última en la que está la pieza "Todxs xs santxs" de Órion Lalli, que es la imagen blasfema de la Virgen María. Lalli, activista LGTB, afirma que usa esta representación para hablar "del cuerpo en el que vivo con HIV".
ADVERTENCIA: LA IMAGEN PUEDE HERIR LA SENSIBILIDAD DEL LECTOR
El diputado católico Márcio Gualberto asistió al lugar y grabó un video que compartió en redes sociales en el que denunció que "se exhibe un absurdo escarnio de la fe cristiana".
"La pregunta que hago es si esto aquí debería estar en un espacio administrado por la Prefectura de Río de Janeiro. Evidentemente no. Es, por lo menos, de un extremo mal gusto", dijo el parlamentario en el video.
El diputado explicó que al costado de la imagen blasfema "está la siguiente frase: 'Dios encima de todo, gozando encima de todos'", que hace referencia a la frase usada en la campaña del actual presidente Jair Bolsonaro: "Brasil encima de todo, Dios encima de todos".
Márcio Gualberto indicó que la imagen blasfema de la Madre de Dios parece ser "un escarnio que corresponde al nuevo contexto de la libertad de expresión, pero eso es inaceptable".
El diputado indicó que pedirá explicaciones a los responsables del espacio cultural y a la Prefectura de Río. Según O Globo, el parlamentario ya envió un requerimiento al prefecto Marcelo Crivella y al secretario de cultura Adolfo Konder.
Otro diputado estatal que se manifestó contra la muestra blasfema fue Paulo Teixeira, quien también hizo una solicitud al prefecto para que la retire.
"No se trata de censura porque la ley no la permite. Tampoco permite que se cometa un vilipendio contra el sentimiento religioso, sea la creencia que sea: católico, espiritista, evangélico", dijo el parlamentario según señala O Globo.
Un equipo de la Secretaría de Cultura estuvo en el local en la mañana del jueves 20 de febrero y solicitó que la edad mínima para verla no sea de 10 sino de 16 años.
Traducido y adaptado por Walter Sánchez Silva. Publicado originalmente en ACI Digital
