Desde la Basílica de Guadalupe comienza preparación para Congreso Americano Misionero

Desde la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe en Ciudad de México, el presidente de las Obras Misionales Pontificias, Mons. Giampietro Dal Toso, dio inicio al camino de preparación para el Congreso Americano Misionero (CAM 6) Puerto Rico 2023.

Al presidir la Santa Misa en el santuario mariano el domingo 16 de febrero, acompañado de obispos de Puerto Rico y México, Mons. Dal Toso señaló que "comienza desde hoy un camino de preparación que empeñará a todas las diócesis de todo el continente, de manera que el Congreso Misionero sea de verdad un acontecimiento eclesial".

"Es decir, algo que comparten todas las Iglesias de este continente, todos los católicos de este continente. Este congreso podrá tener una influencia real para que el celo misionero pueda renovar a todas las Iglesias, unidas en la comunión universal", señaló.

También participaron en la ceremonia los directores de las Obras Misionales Pontificias (OMP) de toda América.

Tras recordar que el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe fue "determinante para la evangelización de todo el continente americano", el presidente de las OMP dijo que "en el camino hacia el CAM, como en todas las actividades de nuestra vida, necesitamos la sabiduría, necesitamos una sabiduría que ilumine, inspire, acompañe, perfeccione el impulso misionero".

"Como misioneros también hoy estamos llamados a presentar el misterio de Cristo muerto y resucitado, sabiduría divina. Ni el éxito ni la violencia ni el poder son el lugar de la vida. El lugar de donde se resucita es el sufrimiento acogido por amor y vivido hasta el extremo. La sabiduría divina que rige el universo, gracias a la cual todo se sostiene, es el ofrecimiento de sí mismo por amor, cuya plenitud nos ha manifestado Cristo", afirmó.

Mons. Dal Toso subrayó que "para poder ser misioneros debemos ante todo sumergirnos en esta sabiduría y hacerla nuestra, sin miedo a perder nuestra sabiduría demasiado humana. Sino todo permanece en tinieblas".

"Preparar el CAM significa dejarse iluminar por una sabiduría que viene de lo alto y que no es nuestra, dejarnos interrogar sin miedo y sin prejuicios por esta sabiduría divina, fuera de la cual toda la realidad ecológica, humana, social, eclesial, se queda en las tinieblas", añadió.

El presidente de las OMP remarcó que "la universalidad de nuestra misión se inscribe en el hecho de que Dios es creador de todos los hombres, y todos los hombres desean entrar en la plena verdad de su vida. La Iglesia se entiende como portadora de esta sabiduría, y una Iglesia misionera como la desea el Papa Francisco no puede no responder a esta llamada universal".

"Ningún hombre puede ser excluido del conocimiento y de la comunión de vida con Dios Padre, con su Hijo Jesucristo y con el Espíritu Santo", resaltó.

El Prelado indicó que el continente americano "ha recibido el Evangelio para hacerlo suyo, para interiorizarlo y para darlo. El discípulo misionero es un discípulo porque recibe la fe y es misionero porque la da".

"Abrámonos al mundo entero para que el mundo entero encuentre la clave de la interpretación de la vida, de la historia, de todo el ser, en la sabiduría de Cristo, en la que todo ha sido creado", dijo.

Mons. Dal Toso subrayó que "el anuncio de la fe es algo prioritario para la Iglesia", pues "la Iglesia es misionera más allá de las fronteras geográficas y culturales. Más allá de los mares y los muros".

"Pidamos hoy con fuerza a María, Sedes Sapientiae, sede de la sabiduría, hacer nuestra la sabiduría divina manifestada en Cristo, para que podamos hacer partícipes de ella a cada hombre que vive en la faz de la Tierra", finalizó.