Los fieles en Argentina preparan la celebración internacional del Día del Niño por Nacer el próximo 25 de marzo, con la campaña "Caminando hacia Un Rosario por la Vida".
Un Rosario por la Vida comenzó con un grupo de mujeres en 2004 y luego fue impulsada por el entonces Cardenal Jorge Mario Bergoglio, hoy Papa Francisco.
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De esta forma, cada 25 de marzo los fieles se reúnen en la Catedral de Buenos Aires para rezar el Santo Rosario y celebrar una Misa por los niños que están por nacer.
Debido a los debates de leyes y normativas que atentan contra la familia y la vida en el país, la iniciativa de rezar el Rosario ha ido creciendo hasta transformarse en un tiempo de preparación para reflexionar sobre los distintos ataques que sufre la humanidad.
Los grupos participantes que van "Caminando hacia Un Rosario por la Vida" se comprometen a rezar el Santo Rosario, hacer lectio divina y a reflexionar en torno a los documentos magisteriales de la Iglesia, como las encíclicas.
De esta forma, el tiempo concluye con la celebración Eucarística en la Catedral de Buenos Aires el próximo 25 de marzo a las 6:00 p.m.
Las personas pueden informarse AQUÍ y los interesados en participar pueden sumarse en el wathsapp +5415 64333336
Día del Niño por Nacer
El Día del Niño por Nacer comenzó en Argentina hace más de 20 años gracias a un grupo de mujeres de distintas parroquias.
Se escogió el 25 de marzo, Fiesta de la Anunciación, cuando Jesucristo fue concebido en el seno de María, para "poner la vida humana, bajo el manto protector de la Virgen", dijo Olga Muñoz, una de las organizadoras de la actividad.
La propuesta fue presentada al entonces presidente Carlos Menem, que firmó el decreto 1406/98 el 7 de diciembre de 1998.
La primera celebración se realizó el 25 de marzo de 1999 en el Teatro Coliseo de Buenos Aires y congregó a representantes de la Iglesia e invitados especiales, como el Arzobispo de Boston (Estados Unidos), Cardenal Bernard Law; el secretario del Pontificio Consejo para la Familia del Vaticano, Mons. Francisco Gil Hellín; y el Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, Mons. Renato Martino.
También participaron representantes de otras denominaciones cristianas, así como líderes judíos y musulmanes.
Poco antes de la fiesta, Menem alentó a todos los presidentes de los países latinoamericanos, España, Portugal y Filipinas a sumarse a la iniciativa de declarar el 25 de marzo como Día del Niño por Nacer.