El Obispo de El Alto (Bolivia), Mons. Eugenio Scarpellini, exhortó a que las elecciones presidenciales del 3 de mayo en Bolivia sean pacíficas y democráticas, evitando las movilizaciones que solo generan violencia y no desembocan en resultados positivos para el país.
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"Una vez más queremos como Iglesia Católica exhortar a que el proceso sea lo más pacífico y lo más democrático posible", señaló Mons. Scarpellini este martes 7 de enero a los actores políticos que participarán de las elecciones.
Además, en referencia al llamado del dirigente cocalero Andrónico Rodríguez de reactivar las movilizaciones de sectores afines al Movimiento Al Socialismo (MAS), Mons. Scarpellini señaló que "un dirigente tiene la responsabilidad y el deber de conducir procesos electorales democráticos, en ningún momento la violencia alcanza resultados positivos para nadie".
El Movimiento Al Socialismo es la agrupación del expresidente Evo Morales, que renunció al cargo el 10 de noviembre en medio de protestas callejeras contra los resultados de las elecciones del 20 de octubre de 2019, con las que buscó ejercer un cuarto periodo presidencial consecutivo.
En un informe, la OEA señaló que estos comicios estuvieron plagados de irregularidades.
El 5 de enero, Rodríguez anunció que "la resistencia pacífica" a la gestión de la presidenta Jeanine Áñez termina el 22 de enero, dejando la posibilidad de una reactivación de las movilizaciones registradas tras las elecciones de octubre pasado.
Ante esto, Mons. Scarpellini señaló que la Iglesia no puede aceptar ninguna declaración que aliente a la violencia y aclaró que "el país necesita vivir en paz este proceso, necesita depositar confianza en un proceso electoral transparente".
Además, indicó que se necesita "al futuro con nuevos gobernantes elegidos por el pueblo, que tienen la garantía de imparcialidad, del compromiso fuerte para el bien del país, y para un desarrollo realmente positivo".
Finalmente, Mons. Scarpellini resaltó que como Iglesia seguirá apoyando la democracia en el país, junto con los organismos internacionales.
Entonces como Iglesia seguiremos en la medida de lo posible junto a los organismos internacionales apoyando la democracia y el proceso democrático.