Cada 9 de noviembre se celebra a Santa María de la Almudena o Nuestra Señora de la Almudena, patrona de la Archidiócesis de Madrid.
Nuestra Señora de la Almudena ostenta también el título de patrona de la capital española desde su fundación como villa. Fue coronada canónicamente el 10 de noviembre de 1948 y declarada única patrona de Madrid en 1977 por el Papa San Pablo VI.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Sobre su bello nombre
El nombre “Almudena” procede del vocablo árabe al-mudayna [la ciudadela], diminutivo de al-madina [la ciudad]. La expresión Al-mudayna empezó a hacer referencia al antiguo recinto militar rodeado por una muralla que ocupaba la colina, o el levantamiento de tierra, donde hoy están la Catedral y el Palacio Real de Madrid.
Un poco de historia
La historia de la imagen de la Virgen de Santa María la Real de la Almudena se remonta, de acuerdo a la tradición, a los tiempos apostólicos. Se dice que el Apóstol Santiago llevó la estatuilla de la Virgen a España cuando llegó a predicar a la Península; se dice además que la imagen fue tallada por Nicodemo, sobre la base de la pintura que habría hecho San Lucas, el Evangelista.
La devoción a la Madre de Dios bajo la advocación de la Virgen de la Almudena, también llamada “Santa María de la Vega” o “La Concepción Admirable”, ha acompañado a los madrileños por siglos y siglos.
A comienzos del siglo VIII, ante la inminente invasión árabe de la Península Ibérica, ocurrida entre los años 711 y 714, los cristianos de la villa escondieron la sagrada imagen para evitar su profanación.
Siglos más tarde, en 1085, cuando el rey Alfonso VI reconquistó Madrid, se organizó un cortejo para celebrar la victoria, con él a la cabeza. Al llegar junto a la muralla de la ciudad, parte del armazón de piedras de la pared se derrumbó dejando al descubierto el lugar donde la imagen de la Virgen había sido escondida. La tradición da cuenta de que la imagen estaba flanqueada por dos cirios encendidos milagrosamente. Eso ocurrió el 9 de noviembre del año 1085.
La imagen tallada
El tallado actual de la Virgen de la Almudena es de madera, hecho de pino, en dorado y policromado. En él se muestra a María sosteniendo al Niño en sus brazos. Esta imagen probablemente fue hecha a finales del siglo XV o principios del XVI; sustituyó a la escultura anterior mencionada en las crónicas. Es posible también que esta última haya reemplazado a otra anterior que se habría quemado en tiempos del rey Enrique IV (1425-1474).
Hay evidencia categórica para sostener que la imagen de la Virgen permaneció en la iglesia de Santa María desde 1626 hasta 1890. Ese año, el entonces Arzobispo de Madrid, Mons. Ciriaco Sánchez, dispuso que la imagen de Nuestra Señora no sea revestida, como era la costumbre, para no estropear ni ocultar su hermoso tallado. De hecho, fue este prelado quien la mandó restaurar, pues la imagen tenía daños considerables, quedando tal y como luce en el presente -y puede ser apreciada en el altar dedicado a Ella en la catedral de la Almudena-.
La procesión
La imagen que sale en procesión es una réplica exacta de la talla que, por motivos de seguridad, no sale del templo.
En 2015, con motivo del 375 aniversario de la fundación de la Congregación de la Real Esclavitud de Santa María la Real de la Almudena, el Cabildo Catedralicio decidió que la Virgen de la Almudena volviera a vestirse para su salida extraordinaria, lo que se ha mantenido hasta hoy.
Si estás en Latinoamérica…
Como se sabe la fe católica es el elemento fundamental que ha marcado la identidad de América Latina junto a la lengua castellana y un sinnúmero de elementos culturales más. La piedad filial a la Virgen María es parte esencial de esa identidad e integra la herencia hispánica recibida. María Santísima es motivo de fervor y unidad de todos los pueblos latinoamericanos, entrelazados por sus distintas advocaciones.
En ese gran marco de piedad a la Madre de Dios no debe sorprender la existencia de una réplica de la Virgen de la Almudena en el Perú. Esta se halla en una Iglesia dedicada a esta advocación, el Templo de la Almudena, ubicado en la ciudad del Cusco. La imagen fue hecha por el artista cusqueño Juan Tomás Tuyro Túpac por encargo del obispo Manuel de Mollinedo y Angulo en el año 1699.