Las familias de Villa Rodrigo Bueno en Buenos Aires (Argentina) pidieron a los candidatos presidenciales, legisladores y gobernantes que no los utilicen como excusa para justificar el aborto legal.

En el contexto del Día de la Madre en Argentina celebrado el 20 de octubre, las vecinas del lugar realizaron el evento "No somos excusa" para decir que "las mujeres pobres no desechamos a nuestros hijos. Ser mamá es un regalo que no tiene precio", dijeron Miriam y Aixa vecinas de la villa.

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"No caigamos en el cuento de que con la ley del aborto están defendiendo los derechos de la mujer", dijo una de las mujeres.

"¿La mujer tiene derecho sobre su cuerpo?, claro que sí ", se respondieron. "Pero no a descartar a un ser humano por venir".

En ese sentido, alentaron a defender los derechos pidiendo una mejor calidad de atención en los hospitales públicos, una mejor infraestructura e insumos en los mismos, por más acompañamiento tanto médico como psicológico a las mujeres embarazadas.

Las demandas de las mujeres y unos cinco mil vecinos de la villa responden a los argumentos presentados por los seis candidatos a la presidencia durante el debate del 13 de octubre.

Por el Frente de Todos, Alberto Fernández, cuya candidata a la vicepresidencia es Cristina Fernández de Kirchner, dijo que con "la legalización le vamos a dar a las mujeres pobres que hagan su aborto en condiciones de asepsia como lo hacen las ricas en los grandes sanatorios". 

Nicolás Del Caño, del Frente de Izquierda Unidad, sostuvo que su lista es "cien por ciento a favor del aborto legal" mientras que Juan José Gómez Centurión, del Frente NOS, fue el único candidato presidencial que manifestó con firmeza su postura provida.

El evento "No somos excusa" del 19 de octubre fue apoyado por las instituciones que componen Unidad Provida y ofreció a los vecinos juegos, mates y música. 

 

 

Los más pequeños pintaron un mural para destacar el derecho a vivir, se realizaron charlas sobre el cuidado dental y se plantaron lapachos, para simbolizar a los niños que nacieron y crecen en la villa, un gesto que mese atrás nació en la Villa 31 y también se replicó en La Cárcova.