Una turba de más de 500 extremistas hindúes atacó durante cuatro horas con palos, fierros y pistolas un colegio católico en la India, hiriendo a dos alumnos y a un sacerdote jesuita.
El sacerdote jesuita Thomas Kuzhively informó a la agencia vaticana Fides que la horda de extremistas hindúes atacó el colegio St. John Berchmans, ubicado en Mundli Tinpahar, a unos 38 kilómetros al sur de Sahibganj, una de las principales ciudades del estado de Jharkhand, en el este de India, cerca a la frontera con Bangladesh.
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Tras el ataque el colegio permanece cerrado. "Ni la policía ni el gobierno estatal aún no han tomado ninguna medida", lamentó el sacerdote.
El día del ataque los extremistas llegaron al colegio con palos, cadenas, barras de hierro, cuchillos y pistolas. Atacaron a los alumnos en la residencia Loyola Adivasi, dejando a dos gravemente heridos.
Los jóvenes fueron salvados por las religiosas que sirven en el colegio ya que, informa Fides, aunque se llamó a una ambulancia, la multitud no permitió que los heridos fueran llevados al hospital.
"Más tarde, la policía los llevó al hospital Rajmahal", dijo el sacerdote. "La multitud también trató de acosar sexualmente a las alumnas y al personal femenino", denunció.
Otro sacerdote, el jesuita Nobor Bilung, intentó hablar con los atacantes pero estos lo golpearon en la cabeza. "El director y todo el personal de la administración estaban indefensos. Ninguno de sus esfuerzos logró calmar a la turba", dijo el P. Kuzhively.
Los asaltantes rompieron las ventanas, dañaron las tuberías, los muebles, los sistemas eléctricos y el sistema de audio. Después de destrozar el internado, la multitud fue al edificio de la residencia. También se llevaron el dinero en efectivo de los cajones de las oficinas y tres celulares.
Tres religiosas intentaron impedir el ingreso de la turba, así como algunos agentes de policía que también fueron atacados. Tras cuatro horas de caos, la multitud se dispersó.
El colegio presentó una denuncia en la que estima que el daño en las instalaciones asciende a un millón y medio de rupias, unos 21 mil dólares aproximadamente.
"Hacemos un llamado para que se tomen medidas concretas", indicó el P. Kuzhively.
El sacerdote indicó que el colegio ha hecho un llamado a los jueces, al gobernador y al primer ministro del estado de Jharkhand, al presidente de la comisión nacional de derechos humanos y al presidente de comisión nacional para las minorías, en el que piden una acción inmediata contra los agresores.
Las escuelas de la región harán un paro en protesta por el ataque.