El Vaticano reaccionó a la decisión del Tribunal de Apelaciones de Victoria, Australia, de confirmar la sentencia condenatoria contra el Cardenal George Pell a seis años de cárcel "por la comisión de delitos sexuales", emitida en la mañana de este 21 de agosto, recordando su "respeto a las autoridades judiciales australianas", la insistencia del Cardenal en su inocencia y la cercanía de la Santa Sede a las víctimas de abusos.
"Reafirmando el respeto a las autoridades judiciales australianas, como se declaró el 26 de febrero con motivo del juicio en primer grado, la Santa Sede toma nota de la decisión de rechazar la apelación del Cardenal George Pell", señaló el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, en declaraciones a los medios de comunicación.
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Bruni continuó su comunicado indicando que "a la espera de conocer el desarrollo del procedimiento judicial, recuerda que el Cardenal siempre ha insistido en su inocencia y que es su derecho recurrir al Alto Tribunal".
"Junto a la Iglesia en Australia, la Santa Sede confirma la cercanía a las víctimas de los abusos sexuales y el compromiso, por medio de las competentes autoridades eclesiásticas, de perseguir a los miembros del clero que sean responsables".
Se espera que el Purpurado, de 78 años, enfrente ahora un proceso en el Vaticano por supuestos crímenes canónicos. Sobre este asunto, y en respuesta a las preguntas de los periodistas acreditados en Roma, Matteo Bruni afirmó que "como en otros casos, la Congregación para la Doctrina de la Fe espera el resultado del proceso en curso y la conclusión definitiva de todos los grados del juicio antes de ocuparse del caso".
"Como declaró la Oficina de Prensa el pasado 26 de febrero, el Santo Padre ya había confirmado las medidas cautelares dispuestas contra el Cardenal George Pell al regreso del Cardenal a Australia, es decir, como indica la norma, la prohibición del ejercicio público del ministerio y la prohibición de contactar, del modo y forma que sea, con menores de edad".
Tras la decisión del Tribunal de Apelaciones, el Cardenal Pell regresó a la prisión donde se encuentra recluido desde el pasado mes de marzo para cumplir su condena de seis años de prisión. No obstante, pasados 3 años y 8 meses podrá solicitar la libertad condicional.
En un comunicado publicado horas después de que se anunciara la decisión, la portavoz del Purpurado, Katrina Lee, indicó que "el Cardenal Pell obviamente está decepcionado con la decisión de hoy".
"Sin embargo, su equipo legal examinará a fondo el fallo para determinar una solicitud de licencia especial al Tribunal Superior", agregó Lee. Indicó que el Cardenal "mantiene su inocencia" y que agradece a quienes lo apoyan.
El Cardenal fue declarado culpable el 11 de diciembre de 2018 por cinco cargos de abuso sexual contra dos monaguillos después de la Misa dominical mientras era Arzobispo de Melbourne en 1996 y 1997.
El proceso de diciembre fue el segundo juicio que afrontó el Cardenal Pell, pues un jurado en un juicio anterior no llegó a un veredicto unánime.
El Purpurado tiene todavía la posibilidad de acudir al Tribunal Superior de Australia en Canberra. Sin embargo, expertos legales creen que este esfuerzo tendría pocas posibilidades de éxito, dado el resultado del tribunal de apelaciones.
