El Papa Francisco enviará al Cardenal italiano Francesco Monterisi a la ceremonia de entronización del Emperador de Japón Naruhito, que sucedió a su padre Akihito el pasado 1 de mayo después de una abdicación inédita en la casa imperial japonesa.
El Cardenal Monterisi, de 85 años, es Arcipreste Emérito de la Basílica Papal de San Pablo Extramuros.
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El Santo Padre ya había felicitado al nuevo Emperador Naruhito mediante un telegrama enviado el pasado 2 de mayo.
"Dirijo a Su Majestad mi cordial saludo y mis mejores deseos, con ocasión de su solemne ascensión al trono, y aseguro mis oraciones para que siempre esté dotado de los dones de la sabiduría y la fuerza en su dedicado servicio a la nación", señaló entonces el Santo Padre.
El nombramiento del enviado pontificio trasciende un día después de que se cumplieran 74 años del lanzamiento de la bomba atómica por parte de Estados Unidos sobre la ciudad de Nagasaki el 9 de agosto de 1945, al final de la Segunda Guerra Mundial.
Durante el ataque murieron de forma inmediata 75 mil personas en una ciudad de 240 mil habitantes. En los días posteriores fallecieron otras 75 mil personas.
Nagasaki era una de las ciudades con mayor presencia católica de Japón y que contaba con una rica historia de mártires cristianos del siglo XVI y XVII. Dos tercios de los católicos de Nagasaki perdieron la vida en la explosión.
Por otro lado, también cabe recordar que, durante el viaje a la Jornada Mundial de la Juventud de Panamá, el pasado mes de enero, el Papa Francisco mostró su voluntad de viajar a Japón el próximo mes de noviembre.
