Los últimos nombramientos en la Oficina de Prensa de la Santa Sede y el Dicasterio Vaticano para la Comunicación completan el camino de la reforma de los departamentos de comunicación del Vaticano.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede ya no es el centro de la comunicación del Vaticano y es reemplazada por la dirección editorial del Dicasterio de la Comunicación.
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Aquí están los detalles: Alessandro Gisotti, quien se desempeñó como director "interino" de la Oficina de Prensa del Vaticano, fue nombrado director adjunto de la dirección editorial del Dicasterio para la Comunicación; mientras que Matteo Bruni fue nombrado director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede este 18 de julio.
La dirección editorial, dirigida por Andrea Tornielli, se ha fortalecido, mientras que una persona que no es periodista fue elegida al mando de la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
Matteo Bruni, de 43 años, se unió a la Santa Sede desde 2009, sirviendo en la Oficina de Prensa como asistente en la organización de viajes papales y luego como responsable de los viajes desde 2014.
Bruni habla inglés con fluidez y se graduó en idiomas extranjeros con especialización en ruso y serbio-croata. Como voluntario de San Egidio, viajó por todo el mundo coordinando iniciativas para movimientos católicos.
Con el nombramiento de Bruni, el organigrama de la Oficina de Prensa de la Santa Sede está completo.
El personal de la Oficina de Prensa de la Santa Sede también incluye a Romilda Ferrauto como asesora principal, a la hermana Bernadette Reis y Raúl Cabrera Pérez como asistentes del director, y a Thaddeus M. Jones como gerente de la oficina.
Estas posiciones no estaban vinculadas a la posición interina de Gisotti, quien fue uno de los patrocinadores de la nueva organización de la Oficina de Prensa. Durante su dirección interina también emitió el reglamento de esta oficina.
Gisotti ahora trabajará como el número dos de Andrea Tornielli, quien dirige la dirección editorial del Dicasterio de la Comunicación.
La dirección editorial será responsable de la producción y la entrega de la información, principalmente a través de los medios del Vaticano (L'Osssservatore Romano, Vatican News, Vatican Television), pero también gestionando las conferencias de prensa.
Parte de este cambio ya está en acción: los artículos de opinión de Tornielli se traducen en todos los idiomas más importantes de las oficinas de noticias del Vaticano y también se publican en L'Osservatore Romano.
Paolo Ruffini, el prefecto del Dicasterio de la Comunicación, fue miembro de la "comisión de información" del Sínodo de 2018 e informó a los periodistas todos los días, mientras que el entonces director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Greg Burke, se limitó a coordinar las reuniones informativas.
El nombramiento de Gisotti como número dos del director editorial refuerza el departamento, que asumirá cada vez más el control de la entrega de la información.
Con el nombramiento de Matteo Bruni, el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede podría dejar de ser considerado el "portavoz", como eran, con diferentes matices, Joaquín Navarro Valls, el P. Federico Lombardi, Greg Burke y Alessandro Gisotti.
La Oficina de Prensa de la Santa Sede será ahora una oficina de prensa real, con derecho a brindar a los periodistas un excelente ambiente para trabajar y entregar información. Hasta ahora, la Oficina de Prensa de la Santa Sede también producía informes, que trabajaban como oficina de prensa y de comunicación.
La reforma de la comunicación del Vaticano se puede considerar completa: la Oficina de Prensa de la Santa Sede tiene ahora un organigrama que cubre todos los idiomas más importantes, mientras que la dirección editorial del Dicasterio para la Comunicación finalmente está tomando forma como productor de noticias e información.