Los obispos de Estados Unidos rechazaron las acciones anunciadas por el Gobierno de Donald Trump contra los inmigrantes indocumentados, como las redadas, así como la limitación de asilo para quienes lo soliciten.
El presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, Cardenal Daniel DiNardo, hizo una declaración este martes 16 de julio en respuesta al clima de temor creado por las acciones generales de inmigración anunciadas por el Departamento de Seguridad Nacional y la nueva Regla Final Provisional de la Administración para limitar drásticamente el asilo.
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"Las acciones de cumplimiento como las anticipadas esta semana por la agencia de Inmigración y Control de Aduanas separan a las familias, causan el sufrimiento inaceptable de miles de niños y sus padres y crean un pánico generalizado en nuestras comunidades", subrayó el Cardenal.
"Condeno este enfoque, que ha creado un clima de temor en nuestras parroquias y comunidades en todo el país. Hace poco le escribí al presidente pidiéndole que reconsiderara esta acción", agregó.
Según informa CNN, el Gobierno de Trump presentó una regulación este lunes 15 de julio que podría limitar drásticamente la capacidad de los migrantes centroamericanos para solicitar asilo si ingresan a Estados Unidos por México, según un documento de los departamentos de Justicia y Seguridad Nacional.
Esta regla prohibiría a los migrantes que han residido en un tercer país solicitar asilo en Estados Unidos. Por lo tanto, impediría que los migrantes que pasan por México puedan pedir asilo.
El Gobierno también anunció una serie de redadas para arrestar inmigrantes indocumentados en ciudades como Atlanta, Baltimore, Chicago, Denver, Houston, Los Ángeles, Miami, Nueva York y San Francisco, para luego deportarlos.
Al respecto, el Cardenal DiNardo dijo que "una evidente intención de estas acciones es disuadir a los centroamericanos, quienes huyen por sus vidas, de buscar refugio en los Estados Unidos. Esto es a la vez erróneo e insostenible. Es contrario a los valores estadounidenses y cristianos tratar de evitar que las personas emigren aquí cuando huyen para proteger sus vidas y procurar la seguridad de sus familias".
"Además de este ambiente de miedo, hemos visto a la Administración tomar este lunes 15 más acciones, también inaceptables, para socavar la capacidad de las personas y las familias para buscar protección en Estados Unidos. La nueva regla de la Administración sobre la elegibilidad para el asilo presenta un enfoque similar de inmigración".
"La regla agrega más barreras a la capacidad de los solicitantes de asilo para acceder a la protección para salvar vidas, elude nuestro deber moral y evitará que Estados Unidos asuma su papel principal en la comunidad internacional como proveedor de protección de asilo. Además, mientras se sigue revisando la regla, el análisis inicial plantea serias dudas sobre su legalidad".
"Insto al presidente a que reconsidere estas acciones, la nueva regla y su enfoque de solo cumplimiento. Solicito que se permita a las personas que huyen por sus vidas buscar refugio en los Estados Unidos y que se les dé el debido proceso a todas las personas que enfrentan procesos de deportación", continuó el Purpurado.
"Todos los que están dentro de nuestras fronteras deben ser tratados con compasión y dignidad. Más allá de eso, una solución justa a esta crisis humanitaria debería centrarse en abordar las causas fundamentales que obligan a las familias a huir y promulgar una reforma humanitaria de nuestro sistema de inmigración", concluyó.
La declaración del Cardenal DiNardo recuerda las palabras del Papa Francisco en su mensaje para el Día Mundial de los Migrantes y Refugiados 2019.
"La presencia de los migrantes y de los refugiados, como en general de las personas vulnerables, representa hoy en día una invitación a recuperar algunas dimensiones esenciales de nuestra existencia cristiana y de nuestra humanidad, que corren el riesgo de adormecerse con un estilo de vida lleno de comodidades", expresó el Pontífice.