Un empleado de la compañía multinacional Ikea, en Cracovia (Polonia), presentó una demanda después de ser despedido la semana pasada por publicar en la intranet de la compañía versículos de la Biblia que se oponen a la práctica homosexual.
El ministro de Justicia de Polonia, Zbigniew Ziobro, solicitó a la oficina del fiscal nacional que investigue el caso.
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El problema surgió cuando se pidió a los empleados que asistieran a un evento pro LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transexuales) de la empresa.
En respuesta, el empleado Tomasz K dijo que se oponía a la promoción de la homosexualidad y publicó dos versículos de la Biblia.
El primero fue Mateo 18: 6: "Pero al que escandalice a uno de estos pequeños que creen en mí, más le vale que le cuelguen al cuello una de esas piedras de molino que mueven los asnos, y le hundan en lo profundo del mar"; y el segundo Levítico 20:13: "Si un hombre se acuesta con otro hombre como se hace con una mujer, los dos cometen una infamia y serán castigados con la muerte; caiga su sangre sobre ellos".
Ikea despidió inmediatamente a Tomasz. La compañía dijo en un comunicado que fue despedido por "usar citas del Antiguo Testamento sobre la muerte y la sangre en el contexto del destino que deberían enfrentar las personas homosexuales" y por "expresar su opinión de una manera que podría afectar los derechos y la dignidad de los LGBT+", según indica el medio News.com.au.
Sin embargo, el abogado de Tomasz sostiene que este último simplemente estaba ejerciendo su derecho a expresar sus creencias religiosas.
Tomasz dijo a TVP Info que su trabajo era vender muebles, no promover "ideología del mismo sexo". Cuando se le pidió que eliminara los versículos de la Biblia que había publicado, dijo: "Como católico, no puedo censurar a Dios".
"No creo que haya sido mi deber. Cité dos textos de las Sagradas Escrituras: sobre el tropiezo y sobre el hecho de que la convivencia entre dos hombres es una abominación", dijo, según TVP Info.
Después de que Tomasz fue despedido, otro empleado también renunció en solidaridad.
"Si Ikea promueve la igualdad y la diversidad hacia las personas, ¿por qué ocurrió esta situación donde un católico expresa su opinión y se queda sin trabajo por ello?", dijo el empleado, según información de TVP.
Una portavoz del holding de Ikea, Ingka Group, emitió un comunicado que fue publicado por News.com.au. Según la opinión de la compañía, "utilizar los antecedentes de su religión como una razón para excluir a otros se considera discriminación".
"En Ingka Group creemos que todos tienen el derecho de ser tratados de manera justa y de recibir igualdad de oportunidades, independientemente de su género, orientación sexual e identidad de género, edad, nacionalidad, religión y/o cualquier otra dimensión de su identidad", sostuvo.
Además, dijo que la "inclusión en Ingka Group significa respetar nuestras diferencias individuales y crear un entorno seguro para todos. Las opiniones y opiniones de todos son bienvenidas con el objetivo común de construir un excelente lugar para trabajar".
Tomasz está representado por el grupo legal Ordo Iuris. El presidente del grupo, Jerzy Kwasniewski, señaló que es ilegal censurar la Biblia y que la medida atenta contra los derechos de Tomasz.
"La insinuación contenida en la declaración de Ikea es inaceptable y viola los derechos personales del Sr. Tomasz. Se puede leer como motivada por prejuicios contra los cristianos", dijo a New.com.au.
Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en CNA.