El P. Samuel Bonilla, conocido popularmente como el Padre Sam, publicó un mensaje en sus redes sociales dirigido a las personas que, durante las marchas del orgullo gay, irrespetan los símbolos sagrados y atacan los sentimientos religiosos de los fieles de la Iglesia Católica.
"Como sacerdote, respeto a la persona homosexual que se esfuerza por respetar, y por vivir su vida sin intentar imponer su estilo a los demás, y siempre tiene una puerta abierta para ser acompañado. Ahora bien, en lo que no estoy de acuerdo es en este tipo de actitudes de parte de dicha ideología: atacan a diestra y siniestra nuestra fe, nuestros símbolos sagrados, nuestra Iglesia, etc., y pretenden que todos vivamos a su estilo. Eso no es para nada respeto", indica el mensaje del Padre Sam publicado el 30 de junio.
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El texto del Padre Sam lleva adjunto una fotografía en la que se observa a dos hombres besándose y que visten "hábitos de religiosas" durante una marcha del orgullo gay. Estos hábitos contienen símbolos del lobby gay.
"La imagen que publiqué es de las menos grotescas que encontré. Si se va a pedir algo, se hace dignamente, mostrando primero respeto por uno mismo, por sus cuerpos. Y también hay que recordar que mi derecho existe siempre y cuando no pisotee o anule el derecho de alguien más", criticó.
El Padre Sam también se refirió a aquellos que marchan en frente de niños "exhibiendo sus cuerpos de una manera frívola" y les dijo que "esa no es la manera de pedir un derecho".
El sacerdote señaló que cuando las personas a favor del orgullo gay expresan su opinión, se considera "libertad de expresión", pero "cuando alguien más expresa su punto de vista, dirán, es 'homofobia', 'ataque', 'discriminación', etc.".
"A simple vista, no hay igual de condiciones. Decir esto, no es odio, es ejercer mi derecho (también) de libertad de expresión", afirmó el presbítero.
Más adelante, el Padre Sam dijo que "no es cristiano meter a Dios para justificar una mala acción, refugiándose en un 'falso amor' o misericordia".
"Jesús nunca dijo a la mujer adúltera: 'vete, no te condeno, vive tu adulterio en paz'; al contrario, la recibió con amor pero la exhortó a abandonar el pecado: 'vete, y de ahora en adelante no peques más'", añadió.
Finalmente, citó las Sagradas Escrituras en Isaías 5,20: "¡Ay, los que llaman al mal bien, y al bien mal; que dan oscuridad por luz, y luz por oscuridad; que dan amargo por dulce, y dulce por amargo!".
"La verdad no peca, pero incomoda", concluyó el Padre Sam.
Crítica a la práctica homosexual
Un día antes de esta publicación, el Padre Sam compartió datos actualizados del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/sida (ONUSIDA) para hacer una crítica de la práctica sexual homosexual.
"Datos de ONUSIDA, de lo que pocos hablan, muchos prefieren sentirse 'orgullosos'", dijo el presbítero a través de Twitter.
Entre los datos expuestos se detalla que el riesgo de contraer VIH "es 27 veces mayor entre los hombres que tienen relaciones sexuales con hombre" y "13 veces mayor" para los transexuales.
