En el nuevo documento "Hombre y mujer los creó", el Vaticano afirma que los padres de familia son los principales responsables de la educación de sus hijos, inclusive en lo que respecta a su sexualidad, y que otras instituciones, como la escuela, son subsidiarias.
El texto se titula "Hombre y mujer los creó. Para una vía de diálogo sobre la cuestión del gender en la educación" y fue publicado por la Congregación para la Educación Católica este 10 de junio de 2019.
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El documento aborda la ideología de género desde sus orígenes y advierte que "presenta una sociedad sin diferencias de sexo, y vacía el fundamento antropológico de la familia".
Además, señala, "esta ideología lleva a proyectos educativos y directrices legislativas que promueven una identidad personal y una intimidad afectiva radicalmente desvinculadas de la diversidad biológica entre hombre y mujer", afectando el papel de la familia como educadora de los hijos.
En ese sentido, el documento vaticano llama a reconocer a la familia "como el principal espacio pedagógico primario para la formación del niño", y que esta acción educativa "se une la de la escuela, que interactúa de manera subsidiaria".
El Vaticano precisa que el derecho de los padres es, en realidad, una "obligación gravísima" de "hacerse responsables de la 'educación íntegra personal y social de los hijos', también en lo que respecta a su educación sobre la identidad sexual y la afectividad, 'en el marco de una educación para el amor, para la donación mutua'".
En tal sentido, calificó el derecho a la educación familiar "como insustituible e inalienable" y que, por consiguiente, "no puede ser totalmente delegado o usurpado por otros".
"La familia, como sociedad natural en la que se realizan plenamente la reciprocidad y la complementariedad entre el hombre y la mujer, precede al mismo orden sociopolítico del Estado, cuya libre actividad legislativa debe tenerlo en cuenta y darle el justo reconocimiento", resalta el documento.
En ese contexto, el Vaticano explica que calificar a la familia "con conceptos de naturaleza ideológica que tienen fuerza solo en un momento de la historia y después decaen" –como el de la ideología de género– "significa traicionar su valor".
"Esta ideología induce proyectos educativos y pautas legislativas que promueven una identidad personal y una intimidad afectiva radicalmente libres de la diferencia biológica entre el hombre y la mujer", informó la Santa Sede.
No obstante, reconoce que dentro del mismo núcleo familiar, "el niño puede ser educado para reconocer el valor y la belleza de la diferencia sexual, de la igualdad, de la reciprocidad biológica, funcional, psicológica y social".
Finalmente, el Vaticano resaltó otro derecho no menos importante: "El del niño a crecer en una familia, con un padre y una madre capaces de crear un ambiente idóneo para su desarrollo y su madurez afectiva".
"Ante una cultura que 'banaliza' en gran parte la sexualidad humana, (…), el servicio educativo de los padres debe basarse sobre una cultura sexual que sea verdadera y plenamente personal", añade.
El rol de la escuela
Sobre la escuela, el Vaticano explica que ésta debe ser un "lugar de intercambio" que "promueva la participación" y "dialogue con la familia, que es la primera comunidad a la que pertenecen los alumnos".
Sobre la educación en "afectividad", anota que se necesita de un "lenguaje adecuado y moderado" porque "los niños y los jóvenes aún no han alcanzado la plena madurez y empiezan a descubrir la vida con interés".
"Por lo tanto, es necesario ayudar a los estudiantes a desarrollar 'un sentido crítico ante una invasión de propuestas, ante la pornografía descontrolada y la sobrecarga de estímulos que pueden mutilar la sexualidad'", continúa el texto.
Finalmente, el Vaticano destaca que, frente un "bombardeo de mensajes ambiguos y vagos –cuyo final es una desorientación emocional y el impedimento de la madurez psico-relacional–" se debe ayudar a niños y jóvenes "a reconocer y a buscar las influencias positivas, al mismo tiempo que toman distancia de todo lo que desfigura su capacidad de amar".
El documento completo puede leerlo AQUÍ.