El Administrador Apostólico de Caracas y Arzobispo de Mérida, Cardenal Baltazar Porras, expresó sus condolencias a las familias de los cuatro jóvenes fallecidos durante las protestas en Venezuela, que "perdieron su vida luchando por un mejor futuro" para el país.
Desde el 30 de abril las ciudades de Venezuela han vuelto a ser escenario de protestas contra el régimen chavista, luego que miles de personas salieron a las calles para respaldar la "Operación Libertad" convocada por Juan Guaidó, proclamado presidente interino desde enero pasado, para poner fin al Gobierno de Nicolás Maduro, a quien calificó de "usurpador" del poder.
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El martes Guaidó llamó a la población a manifestarse desde la Base Aérea Generalísimo Francisco de Miranda, conocida como "La Carlota", en un video en el que aparecía con un grupo de militares y con el también líder opositor Leopoldo López, quien estaba bajo prisión domiciliaria, pero que había sido liberado por los militares.
Ante el avance de la #OperaciónLibertad, el régimen cobarde trata de demostrar con represión focalizada un control que ya no tiene.
- Juan Guaidó (@jguaido) May 1, 2019
No le queda respuestas, no le queda nada. Se vieron débiles ayer y hoy lo están más, porque #Venezuela va con todo en las calles. pic.twitter.com/9d4QiSJU1A
Sin embargo, militares que respaldan a Maduro, junto con miembros de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y colectivos chavistas, también salieron a las calles para reprimir las manifestaciones.
Como consecuencia de los enfrentamientos han muerto hasta el momento cuatro personas, según Marco Antonio Ponce, director de la organización humanitaria Observatorio Venezolano de Conflictividad Social.
Las víctimas son los adolescentes Yosner Graterol de 16 años y Yoifre Hernández Vásquez de 14 años. También fallecieron Jurubith Rausseo García de 27 años y Samuel Méndez de 24 años. Todos murieron por impacto de bala. Además hay más de 50 heridos.
En su cuenta de Twitter, el Cardenal Porras dijo que "extendemos nuestras más sinceras condolencias para las familias de los jóvenes quienes perdieron su vida luchando por un mejor futuro para Venezuela. Oramos a Dios por la paz de sus almas y nos unimos a ustedes en estos momentos tan difíciles".
Extendemos nuestras más sinceras condolencias para las familias de los jóvenes quienes perdieron su vida luchando por un mejor futuro para Venezuela. Oramos a Dios por la paz de sus almas y nos unimos a ustedes en estos momentos tan difíciles #laiglesiaestuvoz
- Baltazar Porras (@bepocar) May 2, 2019
Asimismo, ayer 1 de mayo el Purpurado recordó en su cuenta que "la protesta pacífica es un legítimo derecho garantizado en todos los convenios internacionales. Repudiamos y denunciamos ante la Comunidad Internacional la injustificada represión en Venezuela por Cuerpos Policiales del Estado y colectivos armados que disparan a civiles desarmados".
Exige respeto a la Iglesia
El Administrador Apostólico de Caracas también aprovechó las redes sociales para condenar el ataque que cometieron este 1 de mayo miembros de la GNB contra la iglesia de Nuestra Señora de Fátima en Barrio Sucre de la Diócesis de San Cristóbal.
El ataque comenzó cuando dos miembros de la GNB ingresaron en moto al templo cuando la Misa estaba por concluir.
Mons. Mario Moronta, Obispo de San Cristóbal relató en un comunicado que el párroco, P. Jairo Clavijo, bajó del presbiterio para detenerlos, pero "en el intento de diálogo llegó una horda de 40 GNB, quienes intentaban ingresar".
"Detrás de ellos llegó un general de apellido Ochoa quien comenzó a discutir con el párroco, en términos nada respetuosos", relató el Prelado. "No contentos con el atropello, los GNB lanzaron bombas lacrimógenos dentro del templo", denunció Mons. Moronta.
Ante esto, el Cardenal Porras advirtió en su cuenta de Twitter que "es inconcebible el ataque directo a nuestros templos, sin respeto alguno por los feligreses". "Exigimos respeto a la Iglesia Católica, en un país de devotos y creyentes, quienes oran a diario por la paz, el respeto a la vida y el derecho a protestar", añadió.
En su relato publicado ayer, Mons. Moronta indicó que durante el ataque de los GNB, en la iglesia "había un buen número de fieles y entre ellos bastantes personas de la tercera edad. Una religiosa sufrió un desmayo".