"Tengo que decir que un pastor que es culpable de encubrimiento no es digno de ser pastor", afirmó el Secretario adjunto de la Congregación para la Doctrina de la Fe y Arzobispo de Malta, Charles Scicluna.
El Prelado concedió una entrevista al diario Encuentro, del Arzobispado de Santiago de Chile, en donde reflexionó sobre la relación del Vaticano con la justicia civil, su diagnóstico sobre la Iglesia en Chile, el estudio de nuevas reformas para la protección de menores, entre otros temas.
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Mons. Scicluna, de 59 años, se ha convertido en una figura clave en el proceso que lleva a adelante la Iglesia en Chile para acabar con los abusos. Tras visitar el país dos veces en 2018, el Prelado entregó al Papa Francisco un extenso informe que recopila antecedentes y testimonios de situaciones de abusos sexuales, de autoridad y de poder.
Algunas conclusiones del llamado "Informe Scicluna" se incluyeron en el documento de trabajo que el Santo Padre entregó o los obispos de Chile en mayo de 2018 y también lo llevaron a reconocer sus "graves equivocaciones de valoración y percepción de la situación".
En su entrevista al diario Encuentro, Mons. Scicluna señaló que "en los últimos meses, que han sido bastante difíciles, vi desarrollos positivos en la Conferencia Episcopal de Chile, lo que para mí es un signo de gran apertura para que se haga justicia a las víctimas".
Consultado sobre la posibilidad de que el Vaticano pueda entregar el "Informe Scicluna" a la justicia y hacerlo público, el Prelado respondió con una negativa, ya que la documentación recibida "respondía a que la información iba a ser dirigida directamente al Santo Padre".
"Ésta era la intención y deseo de las personas con las que nosotros nos encontramos en Chile. Yo consigné toda la información al Papa y estoy convencido de que él respetará la voluntad de estas personas, que tuvieron fe en él. Sin perjuicio de lo anterior, animo a todas las personas que así lo deseen, a que entreguen sus antecedentes a la justicia chilena", dijo.
Sobre la opción que algunos plantean de que los sacerdotes se puedan casar como una respuesta para acabar los abusos, Mons. Scicluna indicó que "desgraciadamente en el mundo, la mayor parte de los abusos han sido cometidos por gente que está casada, por lo que el matrimonio (de los sacerdotes) no es la respuesta".
"La respuesta se encuentra en todos los métodos de prevención y en la formación de los futuros sacerdotes, bajo una sana paternidad y fraternidad espiritual, en la cual no se entienda el sacerdocio como un privilegio, sino que como un servicio", sostuvo.
En cuanto a la negligencia del encubrimiento por parte de obispos y otros miembros de la Iglesia, el Arzobispo de Malta reiteró la condena del Papa Francisco que sostiene que "el encubrimiento es un delito grave, tan grave como es el abuso sexual".
"Un pastor que es culpable de encubrimiento no es digno de ser pastor. Este es el punto que diferencia al pastor que actúa como una madre amorosa (carta apostólica del Papa Francisco de 2016), que no obra en la maldad del encubrimiento, sino que toma conciencia del daño que se hace al Pueblo de Dios. El encubrimiento no hay que aceptarlo", afirmó.
En otro aspecto, consultado sobre la posibilidad de levantar el "Secreto Pontificio" con motivos de protección de menores, el Prelado expresó que "esto se está debatiendo en varios niveles. Es algo que hay que discutir en la Congregación de la Doctrina de la Fe, también con la Secretaría de Estado".
Agregó que "existen diferentes opiniones sobre qué es lo que el Papa debiera decidir. Existe un movimiento en evolución que recomienda quitar la confidencialidad máxima en estos casos, protegiendo la buena fama y la libertad, que viene garantizada en todo caso. Para mí esto bastaría".
En su mensaje al pueblo chileno, Mons. Scicluna agradeció "por la acogida que me dio" y llamó a "que oren mucho por el Santo Padre, para que siga tomando todas las decisiones necesarias, para que exista una nueva primavera en la Iglesia en Chile".