Fray Manuel Corullón es el custodio de los franciscanos en Marruecos y el responsable de la liturgia durante la visita del Papa Francisco a este país que tendrá lugar del 30 al 31 de marzo.
Como responsable de la liturgia y coordinador de esta visita papal, fray Manuel Corullón explicó, a pocas horas de la llegada del Papa, que en todos los elementos de la Misa, así como en la decoración que se ha utilizado, se ha querido "que fueran elementos autóctonos que tengan que ver con Marruecos. Por eso se evocarán las murallas de Rabat y otros monumentos" del país africano.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
De hecho, la cruz que presidirá el altar durante la Misa que celebrará el Papa Francisco en el complejo deportivo Príncipe Molay Abdellah es "una reproducción de la cruz del monasterio Tibherine, en Argelia, donde fueron martirizados los monjes cistercienses que fueron beatificados el pasado 8 de diciembre en Orán".
Fray Manuel Corullón, custodio de los franciscanos en Marruecos - Foto: Blanca Ruiz (ACI Prensa)
El altar es el de la iglesia de San Francisco de Asís de Rabat, que "ha sido restaurado y trasladado para la celebración de la Misa del Papa" del 30 de marzo.
Según afirma el franciscano, de esta manera se pretende mostrar "con los elementos que vamos a poner en el altar, el amor de la Iglesia de Marruecos por este país".
Celebración de dos importantes centenarios
Además de la alegría por la visita del Papa, la Orden de los Franciscanos celebra durante el 2019 dos aniversarios muy especiales.
"Es una pura coincidencia, pero una coincidencia que para los franciscanos es muy importante porque esta visita del Papa coincide con el octavo centenario de la llegada de los franciscanos a Marruecos y también con el octavo centenario del encuentro de San Francisco de Asís con el Sultán en Egipto. Dos acontecimientos que a nivel de la Orden estamos viviendo con oportunidad de crecimiento personal, pero también de acción de gracias", afirmó.
El encuentro de San Francisco con el sultán Malik al-Kamil tuvo lugar en 1219 en medio de la quinta guerra entre los cruzados y el islam. Después de numerosas dificultades San Francisco y el Sultán se encontraron y, según recoge San Buenaventura, "el siervo de Dios Francisco respondió con un corazón intrépido que no había sido enviado por los hombres, sino por el Dios Altísimo, para mostrarle a él y a su pueblo el camino de la salvación y proclamar el Evangelio de la verdad"; y "el sultán, viendo el admirable fervor del espíritu y la virtud del hombre de Dios, lo escuchó con gusto".
Fray Manuel Corullón precisó que "de alguna manera, el modelo del encuentro de San Francisco con el sultán se va a repetir también de un modo importante con el encuentro del Papa con el rey de Marruecos, y será un mensaje muy importante de Marruecos al mundo, de cara al diálogo interreligioso y al encuentro que los franciscanos en estos 800 años hemos querido vivir en este país".
Signos que permanecerán tras el viaje
En ese sentido el custodio de los franciscanos en Marruecos recuerda a todos los que colaboran en la organización del viaje que "lo importante de la visita no es solo el sábado o el domingo cuando el Papa se encuentre aquí entre nosotros, sino que lo realmente importante sucederá después".
"Lo que vamos a vivir en este momento creo que tiene que cambiarnos de alguna manera importante. Cuando San Juan Pablo II vino a visitar Marruecos en 1985, las palabras que él dijo fueron y siguen siendo muy importantes para la Iglesia de Marruecos de hoy", afirmó.
"Por eso creo que las palabras que el Papa Francisco va a dirigir a la comunidad musulmana en su encuentro con el rey, así como las que dirigirá a la comunidad cristiana van a ser muy importantes para la Iglesia y creo que nos va a lanzar a un camino de apertura al diálogo y de conversión personal", aseguró el responsable de la Custodia en Marruecos.
Fray Corullón también subrayó que algunas de las claves de este viaje las ha dado el mismo Papa Francisco en el mensaje que envió al pueblo marroquí el 28 de marzo. "El encuentro, el diálogo, el reconocer al otro como un creyente y como un hermano… El Papa hace referencia a paz y a reconciliación", precisó el franciscano.
También calificó esta visita a Marruecos, la quinta a un país árabe del Papa Francisco, de "muy importante y profética", y aseguró que espera que estos viajes "al mundo árabe sirven para ser instrumentos de paz y reconciliación en un mundo tan dividido por guerra, enfrentamientos y divisiones, y donde el elemento religioso forma una parte muy importante".