17 de marzo de 2019

Mar 17, 2019

La Arquidiócesis de Managua condenó la violencia de la policía contra las personas que se manifestaron pacíficamente el sábado 16 de marzo a favor de la libertad de los presos políticos en Nicaragua.

"La Arquidiócesis de Managua deplora y condena los hechos de la tarde del sábado 16 de marzo en la ciudad capital que evidencian la necesidad de resolver con franca y efectiva responsabilidad la crisis nacional", señala un comunicado.

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El sábado 16 de marzo a las 2:00 p.m. se convocó en Managua una gran marcha para manifestarse a favor de la libertad de los presos políticos. Un día antes la policía había informado que no permitiría su realización.

Los manifestantes convocados por la plataforma Unidad Nacional Azul y Blanco tenían doce recomendaciones para la marcha, entre las cuales estaban no provocar a la policía y caminar en grupos de al menos 15 personas.

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Desde tempranas horas de la mañana la policía estuvo presente en los puntos de concentración, detuvo a decenas de participantes y agredió a periodistas que seguían los pormenores del evento.

En total fueron más de 100 los detenidos, entre los cuales estaba el P. Juan Domingo Gutiérrez Álvarez, Vicario Parroquial de la Parroquia San Agustín en la zona pastoral central de Managua. Al ser liberado, fue trasladado a su casa cural por el Nuncio Apostólico Mons. Waldemar Somertag.

El Nuncio también medió para que se liberara a algunos manifestantes que se encontraban rodeados en una gasolinera por la policía antimotines.

El Cardenal Leopoldo Brenes "estuvo atento al desarrollo de los acontecimientos y en comunicación con el Nuncio Apostólico, a quien agradece sus gestiones por la liberación del Presbítero Juan Domingo Gutiérrez Álvarez y demás ciudadanos", señala el comunicado de la Arquidiócesis de Managua.

La represión de la policía también dejó varios heridos en la jornada del sábado que se extendió hasta altas horas de la noche.

"Esperamos que los lamentables sucesos exijan máxima y sincera voluntad en la búsqueda de soluciones efectivas y prontas, como lo deseamos todos los nicaragüenses", concluye el texto.

Varios obispos también expresaron su apoyo a los detenidos, como Mons. Carlos Enrique Herrera, Obispo de Jinotega, quien manifestó su "solidaridad a los ciudadanos que han sido encarcelados por ejercer su legítimo derecho a la movilización pacífica. Como Iglesia también nos solidarizamos con el padre Juan Domingo Gutiérrez que como ciudadano y católico también estaba en la movilización".

Mons. Jorge Solórzano Pérez, Obispo de Granada escribió en su cuenta de Twitter: "Condenable represión sufrida a ciudadanos y periodistas por parte de la policía, mis oraciones por los detenidos y agredidos. ¡El Señor siga siendo nuestra fuerza!"

Por su parte, el Obispo Auxiliar de Managua, Mons. Silvio Báez, expresó: "Mi oración por todos los detenidos por la policía hoy en Managua, por ejercer su derecho constitucional de manifestarse. Especialmente mi cercanía y solidaridad con el padre José Domingo Gutiérrez quien fue detenido llevando pacíficamente en mano una bandera de la Iglesia".

Esta semana Mons. Waldemar Sommertag, acompañado por el secretario de la Nunciatura, Mons. Andrea Piccioni, visitó a 16 presos políticos que se encuentran en los Penitenciario integral de Mujeres y Penitenciario Nacional Jorge Navarro (La Modelo).