25 de enero de 2019

Ene 25, 2019

La joven Carolina Alvarado Esquivel llegó desde Costa Rica junto a sus padres para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Panamá 2019, con el sueño de conocer al Papa Francisco y testimoniar esperanza a los peregrinos en situación de discapacidad.

 

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La falta de oxígeno al nacer provocó en Carolina una parálisis cerebral que derivó en una cuadriparesia espástica. Se trata de un trastorno motriz severo que, además de complicaciones motoras, provoca secuelas como déficit cognitivo, visual, auditivo y de lenguaje.

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Pese a su condición, la joven siguió adelante y en 2018, a sus 18 años, se graduó de bachiller en el Colegio Católico Nuestra Señora de Guadalupe, de la ciudad de Heredia.

Su promoción decidió como viaje de graduación participar de la JMJ 2019. Cuando Carolina oyó esto, pidió: "Mami regalame un viaje a Panamá".

 

"Nosotros vimos a San Juan Pablo II en Costa Rica y si ella llegó con esta iniciativa no podemos decirle que no", dijo su madre Hortensia Esquivel Marina a ACI Prensa.

Hortensia explicó que esta es la primera vez que la familia asiste a una Jornada Mundial de la Juventud. Por lo general Carolina se traslada en una andadera, pero para el evento de Panamá necesitó cambiarla por una silla de ruedas.

Esta familia peregrina participó de la ceremonia de bienvenida del Papa Francisco el 24 de enero y espera seguir asistiendo a las demás actividades de la JMJ con el propósito de que el Santo Padre "nos regale la bendición".

"Esperamos paz y que nos regale la bendición a todo el mundo, porque aquí somos un mundo", expresaron.