El P. Ángel Fernández Artime, Rector Mayor de los salesianos, pidió en el Sínodo de los Obispos ser cercanos a los jóvenes para que escuchen el "susurro de Dios" y para que sientan que "Jesús les ama y les acoge siempre".
El P. Fernández hizo este pedido ayer 17 de octubre durante su intervención en el Sínodo de los Obispos sobre los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional. Es necesario hablar de los jóvenes como Iglesia con "una palabra fuerte, decidida, y atrevida en su favor en todas las naciones de nuestras Iglesias locales".
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El Rector Mayor de los salesianos, que participa como padre sinodal, relató que al visitar las iniciativas que la congregación tiene en el mundo, ha podido ver muchas iglesias "llenas de jóvenes inmigrantes y sus familias".
"Estos son nuestros jóvenes, con sus familias, que además traen aire fresco de fe a nuestras Iglesias"; sin embargo, advirtió que al mismo tiempo "crece el rechazo, los miedos, la intolerancia y la xenofobia".
En esta línea, el P. Fernández invitó a los padres sinodales a ser cercanos a los jóvenes y que se sientan queridos por la Iglesia.
"Nuestros jóvenes deben escucharnos decir que les queremos y que queremos hacer camino de vida y de fe junto a ellos", insistió.
"Deben sentir que ni queremos dirigir sus vidas, ni dictarles cómo deben vivir, sino que queremos compartir con ellos lo mejor que tenemos que es: Jesucristo el Señor. Han de sentir que estamos aquí para ellos, si nos lo permiten, compartiendo sus gozos y esperanzas, sus alegrías, dolores y lágrimas, su confusión o su búsqueda de sentido, su vocación, su presente y futuro", destacó.
Al finalizar, el P. Ángel Fernández Artime exhortó al sínodo a buscar que los jóvenes experimenten el rostro cercano de la Iglesia. "Han de sentir que les susurramos a Dios" para que a través de "nuestra pobre mediación" sientan que "Jesús les ama y les acoge siempre" y así, entonces, "todo habrá merecido la pena", concluyó.