De cara al Sínodo de los Jóvenes que se realizará en octubre, el Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos), Mons. José Gómez, hizo una reflexión sobre el llamado que estos tienen a la santidad y afirmó que están "hechos para mucho más".
En su reciente columna titulada "Los jóvenes y el llamado a la santidad", Mons. Gómez indicó que el mundo actual ofrece estilos de vida donde lo importante es la búsqueda del bienestar material, del entretenimiento y los placeres efímeros.
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El Arzobispo dijo también que los jóvenes tienen el reto de "evangelizar en la era de Wikipedia y de Internet", pues "han crecido pensando que todo lo que necesitamos saber, inclusive las verdades de la fe, pueden 'buscarse' en un dispositivo que podemos sostener en nuestras manos".
"Podemos cometer el error de pensar que sabemos todo lo que hay que saber de Él, porque ya lo hemos escuchado todo antes", indicó Mons. Gómez.
Por ello, señaló, la Iglesia a través del Sínodo tiene el desafío de "buscar nuevas maneras de 'volverle a presentar' a Jesús, a los jóvenes y de llevarlos a una relación viva con Él".
"Hay mucho de qué hablar en las próximas semanas y cuando demos inicio al Sínodo. El documento de trabajo para el Sínodo plantea muchos de los asuntos que nuestros jóvenes enfrentan", afirmó.
Mons. Gómez destacó que han pasado 50 años desde el Concilio Vaticano II y que aún no se comprenden las enseñanzas acerca del "llamado universal a la santidad" y cómo vivirlo en la vida cotidiana.
"Esta es la tarea de los jóvenes, y también la tarea para todos nosotros. No hay atajos para la santidad. Todo ha de volver a Jesús. En Jesús vemos quiénes hemos de ser y cómo hemos de vivir. Para ser santos, tenemos que conocer a Jesús", explicó.
"Jesús vino a mostrarnos que estamos hechos para mucho más, que hemos nacido para cosas más grandes, como lo escribí el año pasado en mi carta pastoral", aseguró el Arzobispo de Los Ángeles.
Dios tiene un hermoso plan de amor para nuestras vidas y para nuestro mundo. Fuimos "creados para la santidad, para ser santos. Fuimos hechos para un amor que es verdadero; para la belleza, la amistad y la alegría que empieza ya en esta vida y se extiende hasta la eternidad. Esta es la buena nueva que la Iglesia necesita proclamar para nuestros jóvenes", manifestó.
El Prelado también indicó que "a medida que nuestra sociedad se ha ido volviendo más profundamente comercial y secularizada y que las instituciones tradicionales de educación y formación, especialmente la familia, se han ido degradando, no podemos dar por hecho que los jóvenes encontrarán el camino que Dios quiere para sus vidas".
"La misión de la Iglesia es la evangelización. Estamos aquí para proclamar a Jesucristo; para proclamar quién es Él, lo que ha obtenido para nosotros con su vida, muerte y resurrección, y lo que les promete a los que lo aman y siguen el camino que Él ha trazado para sus vidas" indicó.
La Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos "Juventud, Fe y Discernimiento Vocacional" se realizará en Roma (Italia) del 3 al 28 de octubre de este año.
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