Humberto Bautista, de 65 años, caminó 140 kilómetros durante dos días hasta la Catedral Basílica de Salta (Argentina) para agradecer al Señor y la Virgen del Milagro porque su hija dejó de sufrir bullying.
Este padre fue uno de los 800 mil peregrinos que llegaron a Salta para renovar su fidelidad a Dios y a la Virgen, en una fiesta dedicada a los santos patrones de la ciudad que se extiende del 13 al 15 de septiembre y que está marcada por una gran procesión y una vigilia de adoración a la Cruz.
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Humberto caminó dos días desde la localidad de El Galpón, ubicada a 140 km al sur de la ciudad de Salta.
El hombre caminó solo debido a que sus amigos que lo acompañarían, desistieron de hacerlo al ser familiares de las ocho personas que fallecieron hace unos días en un accidente automovilístico.
Conmovido, este fiel explicó al portal DNI Salta que peregrinó para "cumplir una promesa por mi hija que le hacían bullying el año pasado y se mejoró".
Sin especificar la situación que afrontó su hija, indicó que ella "mejoró y por eso tengo que seguir. Gracias a eso va al colegio, puede sonreír. Quería abandonar la escuela", señaló el peregrino, quien también sumó en sus intenciones a las familias de los fallecidos en el accidente de El Galpón.
Además de su fe y su promesa, este hombre solo trajo para el camino una bolsita con un plástico que usó como colchón para poder descansar algunas horas, una frazada y botellas de agua para hidratarse
A pocos metros de llegar catedral, Humberto culminó la entrevista con un sólido mensaje: "La fe mueve montañas. Yo presenté mis problemas a Dios y a la Madre María. Hay que poner mucha fe y voluntad y vamos a salir adelante".