La reciente aprobación del sindicato "Organización de Trabajadoras Sexuales" por parte del Gobierno socialista en España es el primer reconocimiento laboral para la prostitución, una actividad que en España no es lícita y que podría encubrir a personas en situación de explotación sexual.
El Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social del Gobierno socialista de Pedro Sánchez en España aprobó el pasado 4 de agosto una resolución que confirmaba la creación de un sindicato llamado "Organización de Trabajadoras Sexuales".
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Según sus estatutos "desarrollará sus actividades en el ámbito funcional de las actividades relacionadas con el trabajo sexual en todas su vertientes" y pretende "la plena constitución de los derechos laborales" de sus trabajadores.
Los estatutos del sindicato no precisan qué tipo de actividades tiene que desarrollar el trabajador sexual que se afilie al sindicato, por lo que podría encubrir a personas en situación de prostitución.
La prostitución en España no es una actividad lícita, por lo que aprobar este sindicato podría suponer un reconocimiento de carácter laboral.
Desde las mismas filas del gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE), la presidenta de Andalucía Susana Díaz, pidió al gobierno central que "haga lo que tenga que hacer" para evitar la creación de este sindicato ya que según precisa "es una manera descarada" de encubrir la trata de personas y la explotación sexual de mujeres.
Díaz informó que trasladará esta postura al gobierno central porque "no se puede permitir que algunos de manera encubierta intenten legalizar la prostitución, el tráfico de personas, la trata y la explotación de mujeres".
El 15 de junio de este año durante la homilía de la Misa celebrada en Casa Santa Marta, el Papa Francisco alzó su voz contra la prostitución y la trata de personas, y advirtió que es parte de la cultura del descarte que se ha impuesto en la sociedad y trata a la mujer como si fuera de segunda categoría.