El Arzobispo de Monterrey, Mons. Rogelio Cabrera López, afirmó que los cristianos deben seguir estando presentes en la política de México y no tomar "vacaciones" de ella, tras las recientes elecciones del 1 de julio.
En un mensaje dado a conocer este 8 de julio titulado "Acompañamiento y compromiso", el prelado afirmó que "una vez que ha concluido el proceso electoral, es necesario que los cristianos sigamos haciéndonos presentes en la vida política de nuestro País, expresando adecuadamente la dimensión social de nuestra fe".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Como lo mencioné en mi Instrucción Pastoral sobre la Participación Política de los Seguidores de Cristo: '¿De qué sirve que mostremos, orgullosos, la mancha en nuestro dedo pulgar, si después nos tomamos unas 'vacaciones' y dejamos de participar hasta las siguientes elecciones?'", cuestionó.
El 1 de julio los mexicanos votaron por candidatos a más de 18 mil cargos públicos. Entre ellos, se eligió al nuevo presidente de México y a nuevos diputados y senadores.
El conteo del Instituto Nacional Electoral dio como ganador de las elecciones presidenciales a Andrés Manuel López Obrador (AMLO), candidato de la coalición de izquierda "Juntos Haremos Historia", con el 53,17% de los votos.
En algunos lugares ya se ha entregado las constancias de mayoría a quienes resultaron ganadores. En otros se sigue revisando los paquetes electorales. Por ello, alienta el Arzobispo de Monterrey, "se debe esperar, pacientemente, a que la autoridad indicada realice el pronunciamiento final".
Tras felicitar a los políticos que ya han sido elegidos, el prelado indicó que "como Iglesia, les acompañamos con nuestra oración, reiterando nuestro respeto de siempre".
Asimismo, invitó "a todos los fieles para que sigan el trabajo que realizarán los que han sido elegidos, sumando con ellos los esfuerzos necesarios en la búsqueda del bien común, siendo siempre sensibles a los problemas que afectan a nuestra sociedad y señalando, caritativamente, aquellas situaciones que nos apartan del Reino de Dios".
Recordando nuevamente su instrucción pastoral, el Arzobispo precisó que "no basta denunciar lo que vemos mal, debemos anunciar y participar en la construcción de una nueva sociedad. Es oportuno desarrollar nuestro profetismo, promoviendo los valores del Reino de Dios e interviniendo con nuestra participación personal y grupal".
"Hagamos que nuestra participación social y política, esté siempre motivada por el amor de Cristo, que es capaz de combatir todo aquello que nos aparta del bien", concluyó.