El Obispo Vicario Apostólico de Aysén (Chile), Mons. Luis Infanti de la Mora, rechazó las acusaciones de encubrimiento de abusos sexuales cometidos por sacerdotes, que presentó un programa de televisión.
El 26 de junio el programa "Informe Especial" de Televisión Nacional de Chile (TVN) presentó los casos de abusos sexuales contra menores cometidos en el ex hogar Villa San Luis, de la congregación religiosa Obra Don Guanella.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
El reportaje denuncia los abusos cometidos por sacerdotes que visitaban el lugar, y que entre ellos habrían realizado prácticas homosexuales. Los denunciantes aseguraron que el obispo local no actuó contra estos hechos, a pesar que se los relataron personalmente.
En una extensa declaración pública, Mons. Infanti negó las acusaciones de encubrimiento y explicó el procedimiento realizado desde que conoció los hechos en 2005.
Explicó que el hogar comenzó a funcionar en 1976 en la ciudad de Coyhaique, región de Aysén, bajo la responsabilidad canónica y civil de la Obra Don Guanella.
Es decir, "con autonomía del Vicariato Apostólico de Aysén, quien solamente aprueba la presencia de la congregación en el Vicariato".
Desde 1991 este hogar es colaborador del Servicio Nacional de Menores (Sename), entidad responsable de su supervisión.
Mons. Infanti aclaró que "en 2005 la asistente social y la psicóloga del hogar detectan maltratos físicos y psicológicos en los menores, y también abusos sexuales entre los mismos menores. De ello informan al director del hogar, al Sename y a mí, como obispo, junto a la comisión Justicia y Paz".
"Dado que en la época el Vicariato no contaba con tribunal eclesiástico que acogiera denuncias, planteo que se realice la denuncia a la Fiscalía Regional para una investigación seria, responsable y profesional, lo que se hizo efectivo", explicó Mons. Infanti.
La investigación del Ministerio Público reveló "graves ilícitos, maltrato infantil y abusos sexuales entre los mismos niños del hogar y personas adultas religiosos de la obra".
En paralelo a esta investigación, el obispo informó a las autoridades de la Obra Don Guanella sobre las denuncias "para que, como lo dicta el derecho canónico, su congregación asuma las acciones correspondientes en estos casos".
Mons. Infanti señaló que en 2006 recibió un informe reservado del Sename donde "queda de manifiesto la gravedad de los maltratos, abusos y violaciones en el ex hogar, que dejó en evidencia la participación de sacerdotes y religiosos de la congregación Obra don Guanella, sin identificarlos aún".
"A raíz de eso me reuní con todo el personal del hogar para instarlos a colaborar con la investigación de la Fiscalía", sostuvo el Prelado, quien agregó que "en noviembre de ese año el Sename ordenó el cierre del hogar".
En 2009 la Fiscalía archivó provisionalmente la investigación y la reabrió en abril de 2011, año en que la revista "Sábado" de El Mercurio publicó un reportaje del caso con algunos de los nombres de los sacerdotes y religiosos denunciados por los menores.
El 20 de mayo de 2011 la congregación reconoció y condenó públicamente los hechos, pidió perdón y manifestó su disposición a colaborar con la Fiscalía, "haciendo eco del entonces reciente protocolo de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) ante casos de abusos de menores por parte de clérigos.
El 4 de agosto de ese año, Mons. Infanti fue citado a declarar a la Fiscalía como parte de la investigación y "aporté todos los antecedentes que conocía".
"El 5 de noviembre de 2012 el Vicariato creó el Consejo 'Cuidado y Esperanza' para la prevención de abusos de menores por parte del clero, en concordancia con las orientaciones de la CECh. Hasta el día de hoy este Consejo no ha recibido denuncias sobre el ex hogar de la Villa San Luis", declaró el obispo.
En su declaración, Mons. Infanti se refirió a las tres personas que lo acusan de encubrimiento en el reportaje. En el primer caso el obispo afirmó que sí se reunió con la víctima, en el segundo reconoció que hubo una conversación con una funcionaria del hogar sobre su despido injustificado, y en el último caso aclaró que nunca se concretó el encuentro ni tampoco conoce personalmente al denunciante.
Asimismo, dijo que para el reportaje "a mí no me contactaron por ninguna vía". Añadió que utilizaron declaraciones suyas de otro programa de televisión "sacándolas de contexto".
Mons. Infanti afirmó que como Obispo Vicario Apostólico de Aysén "siempre mi intención ha sido que en este doloroso caso de Villa San Luis se establezca la verdad y se haga justicia" y pidió perdón a las víctimas de los delitos.
También lamentó que "estas dolorosas situaciones están siendo manipuladas por actores políticos que hoy aparecen, y que en su momento guardaron silencio".
"Manifiesto mi convicción y compromiso para que nunca más en nuestros ambientes eclesiales y sociales se vulneren los derechos y dignidad de niños y niñas, y de toda persona, haciendo eco del llamado del Papa Francisco a vencer la cultura del 'abuso y el encubrimiento', para juntos construir una cultura del 'cuidado y la protección'", declaró Mons. Infanti.
Para leer la declaración completa ingrese AQUÍ.