En el marco de la lucha contra los abusos sexuales, tres diócesis de Chile informaron sobre los procesos que se siguen a sacerdotes acusados de estos delitos, uno de los cuales fue sentenciado a la dimisión del estado clerical.
En un comunicado del 19 de junio, el Arzobispado de Santiago de Chile indicó que inició un proceso administrativo penal al sacerdote Cristián Rojas, párroco de la parroquia Santo Tomás de Aquino y acusado de abusos por una persona mayor de edad.
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Mientras dure el proceso el P. Rojas está "apartado del oficio de párroco y no puede realizar actos públicos propios del ministerio sacerdotal".
Por su parte, la Diócesis de Villarrica informó el 20 de junio sobre la "verosimilitud" de un caso de abuso sexual que habría cometido el sacerdote Belisario Valdebenito Erices contra un menor de edad.
La denuncia llegó a manos de la diócesis en diciembre de 2017, que ejecutó la investigación previa.
"Al comprobar su verosimilitud, siguiendo los protocolos de la Santa Sede, remitimos los antecedentes a la Congregación para la Doctrina de la Fe. Actualmente estamos a la espera de que ese organismo nos entregue una respuesta", indicó en un comunicado.
La diócesis informó que el acusado se encuentra "sometido a las medidas cautelares propuestas para estos casos y se mantiene apartado de cualquier encargo pastoral". Además, la presunta víctima "está siendo acompañada y, en su momento, se le recomendó hacer la denuncia civil".
La Diócesis de Villarrica se mostró dispuesta a colaborar con las autoridades civiles para esclarecer los hechos y se comprometió a "caminar en la instalación de ambientes sanos y seguros que garanticen el cuidado y desarrollo de todos quienes participamos en la Iglesia".
Por su parte, la Diócesis de Talca dio a conocer la sentencia de un "tribunal colegiado" contra el sacerdote Rafael Villena Roco, denunciado en 2015.
El P. Villena fue condenado por unanimidad a "la pena expiatoria perpetua de dimisión del estado clerical", por la "gravedad de las conductas en que ha incurrido el acusado, el daño producido en el denunciante, con un actuar repetido en el tiempo de conductas de abuso y manipulación, y sin que se perciba una disposición de cambio".
La diócesis también informó que el abogado defensor interpuso un recurso de apelación que será tramitado en el Tribunal de Segunda Instancia, correspondiente a la Provincia Eclesiástica de Santiago.
"Pedimos a Dios que nos ayude a todos para avanzar hacia la paz por el camino de la verdad, la justicia y la misericordia", concluye el comunicado.