Nuevo cardenal: México siempre tendrá la bendición de la Virgen de Guadalupe

El Arzobispo Emérito de Xalapa, Mons. Sergio Obeso Rivera, afirmó que México siempre tendrá la bendición de la Virgen de Guadalupe porque ha sido fiel a la Iglesia.

Así lo indicó el neo cardenal mexicano que el próximo 28 de junio hará parte de los 14 nuevos purpurados que el Papa Francisco creará en el Vaticano.

En entrevista concedida al semanario Desde la Fe de la Arquidiócesis de México, Mons. Obeso Rivera alentó a llevar el Evangelio a todos "porque a través de la evangelización podemos darle una respuesta a millones de personas de esta nación que realmente ama al Señor Jesús, y que de la misma manera, en medio de sus dificultades y limitaciones, ha sido fiel a la Iglesia Católica; por esa misma razón tendrá siempre la bendición de Santa María de Guadalupe".

Sobre su creación cardenalicia, el también tres veces presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, contó que "el Santo Padre así lo ha creído oportuno y así me lo ha propuesto; yo he respondido con disposición y entrega absoluta; ahora que lo vea, voy a decirle con alegría: 'Con mucho gusto, Santo Padre. Lo que usted diga'".

"Para mí es un mundo completamente nuevo, espero que el tiempo que el Señor tenga a bien concederme vida, me permita aprender cómo se vive con esta responsabilidad para poder servir mejor a la Iglesia". 

El neo Cardenal dijo también estar "emocionado porque se trata de una situación totalmente nueva y desconocida para mí; esa emoción está envuelta en un temor por pisar terrenos desconocidos. En esta nueva encomienda cuento con el Espíritu Santo, porque sé que en el servicio a la Iglesia y en la vivencia personal de la fe no se puede hacer nada sin la iluminación y la fortificación de Él".

El Arzobispo Emérito de Xalapa dijo además que no conoce personalmente al Papa Francisco, de quien dijo es "un hombre de Dios, con una mentalidad arraigada profundamente en el Evangelio".

Tras el consistorio, Mons. Obeso Rivera dijo que permanecerá unos días más en Roma "para tranquilizarme de tantas emociones, de muchas sorpresas y detalles, de muchas resoluciones pequeñas en casos muy prácticos a los que no estoy acostumbrado".