Con ocasión del Día del Padre, que se celebra en distintos países el tercer domingo de junio, el Arzobispo Emérito de Guadalajara (México), Cardenal Juan Sandoval Íñiguez, alentó a seguir el modelo de la paternidad de Dios.
"La creación entera es una donación del Padre, un regalo para sus hijos, y de Él, como dice San Pablo, viene toda paternidad, en el Cielo y en la tierra. Y los padres en la tierra deben ser de alguna manera reflejo de esa Paternidad Divina que es providencia, que es donación, protección, ayuda para sus hijos", dijo.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
En un video mensaje publicado en su página de Facebook, el Cardenal Sandoval destacó que el Día del Padre "es una ocasión para felicitar a los buenos padres de familia. A los que no solamente engendran, sino que educan, cuidan, alimenta, curan a sus hijos y los aman, y se sacrifican por ellos y por su bienestar".
Pero también, precisó, es motivo para pedir "a los que no han sabido ser padres y tiene por ahí abandonada a su familia, que recapaciten y retomen el camino del propio deber y la propia obligación".
El Purpurado indicó que "la característica del padre es dar, y la del hijo es recibir. El padre da la vida, engendra, da protección, alimento, educación, cuidados, consejos, medicina, a sus hijos, a su familia".
"El hijo recibe todo eso de su padre, junto claro está con su madre, de una manera gratuita", señaló.
El Arzobispo Emérito de Guadalajara criticó a aquellos padres que "se desaparecen", abandonando a su suerte a sus esposas e hijos. "Esta falta de responsabilidad de los varones es algo grave y parece que se va heredando de generación en generación", señaló.
El Cardenal Sandoval advirtió que esta situación "es fruto de la mala educación", pues con frecuencia "el hijo crece en su familia sin que le pidan nada, sin que el padre y la madre lo exijan a que ayude, a que sea responsable".
El arzobispo mexicano dijo también que "cuando se casa un egoísta, el matrimonio va a fracasar".
Al casarse, dijo, un hombre se compromete a "ser padre verdadero, esposo verdadero, que protege, que cuida".
