El diputado socialista Luis Contigiani hizo una apasionada y conmovedora defensa de la vida del niño por nacer este miércoles 13 de junio en el marco del debate del proyecto de ley que busca despenalizar el aborto en Argentina.
Contigiani, que hace unos días renunció al Partido Socialista por su postura en contra del aborto, fue tajante al asegurar que hablaba "con el corazón" y que "no hay ninguna causa para eliminar una vida". "Ningún diputado acá quiere la muerte de nadie", agregó.
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Precisando que no hablaba a nombre del Partido Socialista de la Argentina que apoya la despenalización del aborto, Contigiani resaltó que "no hay un acto más revolucionario, y se lo digo a los jóvenes, que defender la vida y la justicia social en una patria".
"Tengo una profunda convicción humana de que la vida hay que defenderla. ¡No hay ninguna causa para eliminar una vida en Argentina, no puede ser esa la convicción de la política, me rebelo frente a eso!", exclamó.
"Parto de una premisa para que entiendan adónde voy: estamos ante dos vidas, perfectamente individualizadas. No voy a hablar de ciencias biológicas porque eso es obvio. No voy a repetir lo que ya dijo la biología y la genética ya dijeron hasta el cansancio: Hay dos vidas individualizadas. Eso nos tiene que llevar a defender esa totalidad y así salir de la ecuación falsa de que se debe eliminar una vida para garantizar la otra".
Cuando se realiza un aborto, explicó, "lo que se va en una bolsa de basura es un embrión de 14 semanas. Tiene ojos, retina, duerme, tiene uñas, identidad genética. Es una criatura, es un ser humano".
El debate actual, continuó, "toca las fibras más íntimas de un ser humano (…). Yo no puedo disociar mi lucha por la justicia social, por el desarrollo de mi país, por la igualdad de oportunidades de la lucha que hay en el vientre de una mujer, que merece la misma justicia".
"Somos todos justicieros en el campo de la economía. Soy el primero (…). Pero en el campo de la vida por nacer somos privatistas. Nos entregamos al mercado, no hay interés público, nadie defiende nada. Bueno, yo tengo la coherencia o pretendo tenerla, de que lo que defiendo en el campo de la política, la economía y lo social, lo defiendo también en el campo del vientre de una mujer, ahí hay algo que defender. (…) Esa es la salud pública que quiero: una salud pública para la vida". "Tenemos que garantizar derechos con más vidas, no con menos", agregó.
"¡No le hagamos pagar colateralmente con la vida a nadie. Sino lo hacemos, entonces cerremos la persiana. Sino digamos que la vida ya no interesa. No creo que ningún diputado tenga eso en su corazón porque a todos los anima el compromiso por la vida y la justicia!", clamó.
El diputado alentó luego a promover programas de ayuda para las embarazadas, para alimentar a las mujeres en Argentina "que se mueren de hambre" y a generar programas educativos en relación a estos temas.
Dirigiéndose a sus críticos, Contigiani dijo: "A los que me quieran linchar, que me linchen en las redes sociales. No tengo problema por ese lado. Lo que sí quiero decirles es que todo este debate servirá para Argentina si tenemos la decisión de defender toda vida: la de la madre y la del embrión de 14 semanas". "Ese es mi convencimiento profundo", añadió
"Me podrán decir legítimamente, como me lo han dicho, que mi posición puede no tener un gramo de verdad, que puedo estar equivocado, que puedo ser un retrógrado, lo acepto, no hay problema. Pero a esos les digo que voy a contracorriente. ¡Quiero que mi voz suene y que se recuerde en el futuro de la Argentina que he sido una persona coherente en la defensa de la vida, la justicia y la dignidad de la persona!", concluyó.
El proyecto de despenalización del aborto permitiría esta práctica libremente hasta las 14 semanas de gestación; y hasta los nueve meses de embarazo bajo las causales de violación, riesgo de vida y salud de la madre e inviabilidad fetal.
En el caso de la causal por violación, se podrá acceder al aborto con el solo requerimiento y la declaración jurada de la mujer ante el profesional de salud.
El proyecto también incluye la eliminación de personas por su discapacidad y la prohibición de la objeción de conciencia institucional.