Un integrante del grupo feminista Femen irrumpió este domingo en la Plaza de San Pedro, semidesnuda y con un niño en brazos para hacer una insólita demanda al Papa Francisco: que emita una "bula" con la que el Vaticano pueda "lavar parcialmente la vergüenza de siglos de persecución contra las mujeres".
La feminista apareció en la Plaza de San Pedro cuando los fieles se reunían para el rezo del Regina Coeli. Llevaba en brazos un bebé amamantando y en su cuerpo la frase "Alma Mater".
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La mujer fue retirada por la gendarmería vaticana.
"FEMEN exige al Papa que reconozca el derecho de todas las madres del mundo a amamantar en cualquier lugar y en cualquier momento. El derecho a alimentar debe registrarse en la Bula Papal llamada Alma Mater. Con esta primera Bula a favor de una mujer, el Vaticano puede lavar parcialmente la vergüenza de siglos de persecución contra las mujeres", expresó en su sitio web.
Esta acusación contra el Papa carece de fundamento, pues en varias ocasiones Francisco ha defendido el derecho de las madres de dar de comer a sus hijos, incluyendo en audiencias generales o en las Misas.
El 7 de enero de este año el Papa Francisco bautizó a 34 niños en la Capilla Sixtina y habló de la posibilidad de que empezasen a llorar. "Ahora todos están callados, pero basta que uno de el tono y la 'orquesta' le sigue", afirmó.
En ese sentido, indicó que "si ellos comienzan a hacer el concierto (de llorar) porque no están cómodos, tienen calor, o tienen hambre, dadles de amamantar, sin miedo, porque también esto es un lenguaje de amor".
Una invitación similar hizo en abril de 2014, cuando dijo que "para mí cuando los niños lloran, cuando los niños hacen bulla, cuando gritan, es una música bellísima, pero algunos lloran de hambre. ¡Por favor, denles de comer tranquilamente!".
Femen es un grupo extremista creado por un hombre identificado Victor Svyatski, según reveló Kitty Green, directora del documental Ukraine is not a Brothel (Ucrania no es un burdel), en declaraciones al diario británico The Independent en 2013.
En varias ocasiones miembros de este grupo han atacado a personalidades de la Iglesia, como en abril de 2013, cuando agredieron al Arzobispo de Malinas-Bruselas y Primado de Bélgica, Mons. André-Joseph Leonard.
Asimismo, en junio de 2014 dos activistas de Femen se encadenaron a un crucifijo de la Catedral de la Almudena en Madrid (España) con el torso desnudo, en el día en que el Consejo General de lo Penal se reunía para tomar una decisión sobre la ley de la reforma del aborto.
Además, el 25 de diciembre de 2017 otra miembro de este grupo feminista, con el torso desnudo, se lanzó sobre el pesebre instalado en la Plaza de San Pedro e intentó robarse la figura del Niño Jesús, sin embargo, fue detenida a tiempo por uno de los gendarmes.