El Papa Francisco pidió el fin de la violencia y de las venganzas en la República Centroafricana, país sumido en una cruenta guerra civil y en el que el pasado 1 de mayo fallecieron 16 personas, entre ellas un sacerdote, y otras 99 resultaron heridas durante el ataque contra una iglesia en la ciudad de Bangui.
"Invito a rezar por la población de la República Centroafricana, país que he tenido la alegría de visitar y que llevo en el corazón, donde en los días pasados han tenido lugar graves episodios de violencia con numerosos muertos y heridos, entre ellos un sacerdote", fueron las palabras del Santo Padre tras el rezo del Regina Coeli en el Vaticano este domingo 6 de mayo.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Que el Señor, por intercesión de la Virgen María, ayude a todos a decir no a la violencia y a la venganza para construir juntos la paz".
Según informaron diferentes corresponsalías de prensa destacadas en este país africano, varios hombres armados entraron en la iglesia católica de Nuestra Señora de Fátima y dispararon a los 200 asistentes que se encontraban celebrando la fiesta de San José.
Según se informó en un primer momento, y posteriormente se confirmó, el ataque fue perpetrado por la milicia musulmana PK5, también conocida como "La Fuerza". Este grupo terrorista se encuentra en guerra tanto contra las fuerzas gubernamentales como contra las milicias cristianas e, incluso, contra otros grupos musulmanes.
La iglesia de Nuestra Señora de Fátima ya fue objeto de un ataque terrorista en mayo de 2015 en donde murieron 15 personas.
Desde el 2013 la República Centroafricana ha sido objeto de numerosos ataques por el complicado proceso de transición que afronta el país y que ha desatado una ola de violencia por el choque entre los grupos armados Séléka y los "antibalaka", que ha hecho que casi un millón de personas se encuentren desplazadas.