The Catholic Association (TCA) dio a conocer una declaración en la que señalaron que es "confuso y decepcionante ver a los líderes católicos" en el Reino Unido abandonar la enseñanza social de la Iglesia y alejarse del Papa al defender al gobierno en vez de a Alfie Evans y su familia.
En una declaración firmada por Ashley McGuire de TCA, se cuestiona a los "obispos y líderes católicos como Austen Ivereigh de Voces Católicas U.K., que abandonan la enseñanza social católica y se alejan del Papa al defender al gobierno en vez de a Alfie y su familia".
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"La Iglesia ha sido la primera y la única voz en hablar en voz alta con la verdad y en defender al vulnerable. En ese sentido, el Papa también ha defendido a Alfie Evans y los derechos fundamentales de sus padres que luchan para salvar la vida de su hijo".
El Papa, prosigue McGuire, "ha hablado heroicamente mucho antes que los medios como People magazine se refirieran al destino de este pequeño, que ahora es mantenido como un rehén en el hospital y se le está dejando morir de hambre".
Alfie Evans es un niño de 23 meses que lucha por su vida en el hospital Alder Hey en Liverpool (Inglaterra) y que está dando batalla por sobrevivir luego que se le retirara el soporte vital el 23 de abril. En lugar de perder la vida como dijeron los médicos, el pequeño comenzó a respirar por sí mismo. Luego de aproximadamente nueve horas, se le volvió a suministrar hidratación y oxígeno.
Italia le concedió la nacionalidad y, según informó la agencia Efe, este país tiene un avión preparado con un equipo médico que podría viajar hasta Liverpool para trasladarlo a Roma e internarlo en el hospital Bambino Gesú que depende del Vaticano.
En varias ocasiones el Papa Francisco ha expresado su preocupación por Alfie Evans, además recibió en el Vaticano a su padre Thomas para expresarle todo su apoyo.
En su pronunciamiento, McGuire recuerda que "los fieles católicos junto con ciudadanos de bien en todo el mundo se han puesto d pie con el Papa, Alfie y sus padres para defender la belleza de la enseñanza social católica, que condena expresamente lo que el gobierno del Reino Unido está haciendo: negarle a los padres de Alfie sus derechos sobre lo que es mejor para su hijo y obligar al niño a sufrir en sus últimos momentos".
En momentos así los católicos "estamos llamados a (…) defender la verdad incluso si contradice los poderes fácticos. Agradecemos al Papa por su liderazgo y pedimos a los líderes católicos del Reino Unido que se unan a él en defensa de la enseñanza de la Iglesia".
De otro lado, Grazie Pozo Christie, también de TCA, pidió a los católicos "que junto al Papa Francisco" sigan esforzándose para que a los padres de Alfie les permitan llevar a su hijo al Hospital Pediátrico Bambino Gesú, que depende del Vaticano, que se ha ofrecido a cuidar del niño.
