El Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), a través de su Departamento de Justicia y Solidaridad, y la Secretaría de Cáritas de América Latina y el Caribe, exhortaron a la comunidad internacional a realizar todos los esfuerzos posibles para lograr la paz en Siria.
Este llamado responde al ataque perpetrado por Estados Unidos, Francia y Reino Unido en la madrugada del 14 de abril contra las ciudades de Damasco y Homs, y el presunto ataque realizado con armas químicas en la ciudad de Duma por el Gobierno de Bashar al Assad contra los terroristas.
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A través de un comunicado, indicaron que "llegan de Siria noticias terribles de bombardeos con decenas de víctimas, muchas de ellas son mujeres y niños. Noticias de muchas personas golpeadas por los efectos de sustancias químicas contenidas en las bombas".
Recordaron la frase del Papa Francisco: "Todo se pierde con la guerra y todo se gana con la paz". Por ello invitaron a rezar por los muertos, los heridos y las familias que sufren.
"No hay una guerra buena y una mala, y nada, nada puede justificar el uso de tales instrumentos de exterminio contra personas y poblaciones inermes. Recemos para que los responsables políticos y militares elijan el otro camino, el de la negociación, el único que puede llevar a una paz que no sea la de la muerte y de la destrucción", expresaron.
También invitaron a todos los fieles latinoamericanos a que "promuevan momentos de oración, reflexión y solidaridad en favor de la paz en Siria, haciendo partícipes de estos actos de fe a los propios hermanos y hermanas de esta nación".
En declaraciones a Vatican News, el párroco y superior del convento de la Conversión de San Pablo en Damasco, P. Bahjat Elia Karakach, dijo que luego de los ataques del pasado fin de semana "la vida transcurre normalmente", pero "hay gente que está un poco desmoralizada".
"Nosotros somos personas de fe y esperanza, por eso rezamos todos los días para que esta vía prevalezca. Obviamente, sabemos bien que para que pueda haber un diálogo, primero se debe pensar en el bien de los sirios y no en los intereses económicos de las grandes potencias. Solo de esta manera los sirios podrán hablar entre ellos. Creo que no habrá dificultades para lograr esto", aseguró.