Al comenzar el mes de abril, los 300 jóvenes de la organización Manos a la Obra de Rosario (Argentina) recibieron emocionados una carta del Papa Francisco en la que los alentó a "luchar siempre para no enterrar sus talentos bajo la tierra del egoísmo".
La misiva del Santo Padre llegó como respuesta a una carta que la ONG católica le envió en septiembre de 2016, donde explicaban los proyectos solidarios que realizan hace 8 años y que están vinculados a la profesión de sus integrantes, entre ellos abogados, odontólogos, médicos, ingenieros, ecónomos, etc.
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En los últimos trabajos solidarios de la organización, impulsada por la Pastoral Universitaria de la Arquidiócesis de Rosario, se inscribieron más de 450 personas.
En su carta, el Papa Francisco les agradeció por "haber compartido conmigo esta iniciativa, pero gracias sobre todo por haber salido de ustedes mismos y ponerse en camino del encuentro de las personas necesitadas para servirlas con sus talentos".
"Para servir hay que vencer la tentación de la indiferencia, abriendo bien los ojos y el corazón para aprender a ver en el otro a una persona con dignidad y abriendo bien las manos para acercarse a ella con respeto y generosidad, venciendo nuestro egoísmo y nuestro miedo al compromiso", sostuvo el Pontífice.
Asimismo, compartió con ellos la idea de lo importante que es "ver en el otro a un hermano que nos incita a compartir lo que somos dándonos por entero", y los animó a que "sigan así y luchen siempre para no enterrar sus talentos bajo la tierra del egoísmo, del beneficio o del éxito profesional".
Finalmente, les aseguró su oración por ellos y las personas a las que ayudan, "para que sientan en todo momento el amor del Señor que nos llamó a una vida de entera y de servicio".
"Les ruego también que no se olviden de rezar por mí. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide", concluyó el Santo Padre.