Al menos tres ataques incendiarios han sido perpetrados en Boa Vista, estado de Roraima (Brasil) contra varios grupos de inmigrantes venezolanos que huyen de su país ante la grave crisis por la que atraviesa.
En declaraciones a la agencia vaticana Fides, la Superiora General de las Hermanas Misioneras Escalabrinianas, Neusa de Fátima, señaló que "los ataques racistas contra los migrantes venezolanos en Roraima, Brasil, requieren una atención especial por parte de las instituciones y de la comunidad internacional".
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"Cada frontera del mundo se está convirtiendo en un lugar delicado donde, en lugar de consuelo y acogida, el que manda es el odio entre etnias", agregó la religiosa cuya congregación se dedica a servir a los migrantes.
Fides da cuenta de tres ataques, confirmados por la policía, contra venezolanos. El primero ocurrió el 31 de enero en un lavadero de autos. No hubo heridos, solo daños materiales.
El segundo sucedió el 5 de febrero y quedó grabado en video: un hombre arrojó una bomba molotov que incendió una terraza donde dormían 31 venezolanos. Una niña terminó con quemaduras de segundo grado.
El tercer ataque fue perpetrado el 8 de febrero cuando desconocidos arrojaron una bomba molotov a una casa donde dormía una familia de 13 venezolanos, entre los cuales había siete niños.
El ataque causó quemaduras graves a un joven de 23 años y a su hija de tres. Las autoridades ya han arrestado a un sospechoso.
La hermana Neusa de Fátima explicó a Fides que "en los últimos meses, muchas familias venezolanas tratan de escapar de una dura crisis política, económica y humanitaria".
"La respuesta de las instituciones brasileñas aún no es suficiente y esto genera temores infundados en la comunidad de Roraima, la ciudad fronteriza a la que acuden en busca de ayuda".
Ante esta situación, resaltó, es "necesario que se intervenga de forma coordinada en la integración y el análisis de las principales vulnerabilidades, así como en acoger la exhortación del Papa Francisco a no tener miedo, a abrirse al otro, refinando la mirada que nos hace ver el otro no como un invasor, sino como una persona".
Varias instituciones como Cáritas y el Instituto de Migración y Derechos Humanos firmaron un comunicado en el que condenan los atentados.
En los últimos meses han llegado a Boa Vista unos 40 mil venezolanos, la mayoría de los cuales vive en condiciones precarias o en las calles de Roraima.
Además de Brasil, miles de inmigrantes venezolanos llegan cada día a Colombia, Ecuador, Perú, Chile y Argentina.
Según Iván de la Vega, profesor de la Universidad Simón Bolívar de Caracas, alrededor de 2,5 millones de venezolanos viven fuera del país. De estos, cerca de dos millones emigraron desde la llegada al poder de Hugo Chávez.
La gran mayoría abandonó Venezuela en los últimos años ante la grave crisis caracterizada por la mayor inflación del mundo, el desabastecimiento de alimentos, la creciente violencia y la escasez de medicamentos.
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La #crisisdemedicinas ha ocasionado la muerte de otro #sacerdote en #Venezuela. Recemos por su eterno descanso y por la pronta solución a esta crisis. @CEVmedios @ArquiBQTO https://t.co/zalYEa1BQO
- ACI Prensa (@aciprensa) 5 de febrero de 2018