El Papa Francisco visitó la parroquia Santa María Josefa de Castelverde de la diócesis de Roma el domingo 19 de febrero, mantuvo un encuentro con niños en el que respondió a curiosas preguntas, se reunió con los fieles que trabajan en la pastoral y después celebró Misa dominical.
En su divertido encuentro con los niños que acuden a catequesis en la parroquia, narró algunos detalles de su vida y habló del proceso que la Iglesia sigue para elegir un Papa.
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Cónclave para niños
Alessandro preguntó a Francisco "¿Por qué usted se ha convertido en Papa?". El Pontífice respondió entre risas: "Porque hay algunos culpables".
"A uno no le pagan para que se convierta en Papa", sino que "los cardenales son los que lo eligen. Ellos se reúnen, hablan entre ellos, piensan y sobre todo –esto es lo más importante– se reza", explicó.
Refiriéndose al cónclave, dijo que "esta gente que está en clausura, es decir, allí no pueden hablar con gente de fuera, están como aislados, de la Casa Santa Marta van a la Capilla Sixtina a elegir al Papa. Hablan entre ellos de lo que tiene necesidad la Iglesia hoy, y por ello es mejor una personalidad de este perfil o de este otro".
"Después, cada uno da su voto y se hace el recuento, y quien tenga los dos tercios es elegido Papa. Es un proceso hecho de mucha oración. No se paga, no existen amigos poderosos que empujan, no, no", agregó.
Francisco añadió que "es Dios, el Espíritu Santo, el que a través de los votos hace al Papa". "Quizás no es el más inteligente, quizás no sea el más astuto, quizás no es el más espabilado para hacer las cosas, pero es el que Dios quiere para ese momento de la Iglesia".
"Y como en todas las cosas de la vida –continuó–, el tiempo pasa, el Papa debe morir como todos, o jubilarse, como ha hecho el gran Papa Benedicto porque no tenía buena salud, y llegará otro, que será diferente, será diverso, quizás será más inteligente o menos inteligente, no se sabe".
En respuesta a otro de los niños, Agostino, el Papa contó que para ser Papa "hay que ser, primero de todo, buen cristiano. Normalmente primero se es sacerdote, después obispo. Pero en los primeros tiempos de la Iglesia no necesariamente todos los Papas eran sacerdotes: algunos eran diáconos. Pero se debe ser un buen cristiano". "Después, con el tiempo se ha establecido este sistema de elección y ahora solo eligen al Papa los cardenales".
¿Qué quería ser de mayor cuando era niño?
"Te lo cuento, pero no te rías, no hagan bromas, diré la verdad", respondió a Flavio. Quería ser carnicero. ¡De verdad! Porque cuando iba al mercado con la abuela veía como troceaban la carne y pensaba: 'Qué bueno es este hombre', y me gustaba".
Otro de los niños le interrogó sobre cuál ha sido el momento más difícil de su vida. "Por la salud he tenido algunos tiempos difíciles. Cuando tenía 20 años estuve al borde de la muerte por una infección, me tuvieron que quitar parte de un pulmón, pero el Señor me llevó adelante. Y después los momentos difíciles que todos tenemos en la vida", afirmó.
"La vida es un don de Dios, pero en la vida hay muchos momentos feos, hay momentos difíciles que se necesitan superar e ir adelante. Yo he tenido muchos, como todo el mundo". "Para mí la vida –prosiguió– no ha sido fácil. Siempre hay dificultades en la vida, pero no hay que asustarse. Las dificultades se superan, se va hacia delante, con la fe, con la fuerza, con valentía".
Giulia le preguntó cómo se siente al ser el representante de la Iglesia Católica. "Con mucha responsabilidad", dijo Francisco. "Tú has dicho la palabra 'representante' y uno que 'representa' a la Iglesia no puede hacer una fea figura", pero también "el Papa es el Obispo". "Es el Obispo de Roma, pero tiene a su cuidado la pastoral de toda la Iglesia del mundo junto a los otros obispos" y "si el Papa o el Obispo no siente que es padre le falta algo".
El otro es Cristo
El Santo Padre también tuvo un breve encuentro con las familias asistidas por la Cáritas de la parroquia y los voluntarios. "Gracias por lo que hacen. Su trabajo es acercarse a las personas que tienen cualquier necesidad, y no solo dar algo sino también escuchar: es el 'apostolado de la oreja'".
"¡Pero no discutan entre ustedes!", les recomendó. "Piensen esto: cuando viene una persona a pedir ayuda, una señora o un señor o cualquiera, esa persona es Jesús. Porque también Jesús tuvo que pedir ayudar cuando fue un prófugo en Egipto. Es Jesús quien tiene necesidad de esa persona".
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- ACI Prensa (@aciprensa) 19 de febrero de 2017