El Obispo Caldeo de Alepo, Mons. Antoine Audo, compartió algunos aspectos de la tragedia que están viviendo los cristianos a causa de la guerra que desde hace cinco años asola al país y pidió en Suecia que "no abandonen nuestra amada Siria, no dejen que sea destruida y fragmentada".
En el encuentro ecuménico realizado en Malmo, Suecia, ante el Papa Francisco y las autoridades luteranas locales, el Prelado dijo que "nuestra tristeza es ver un cristianismo rico y hermoso está a punto de desaparecer".
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El cristianismo en Siria, recordó el Obispo, está caracterizado por "un profundo sentimiento de ecumenismo, por un estilo de vida en el que cristianos orientales y musulmanes están acostumbrados a vivir juntos, algo que reduce el fanatismo y la desconfianza".
"Cristianos del mundo, musulmanes de Oriente y Occidente, personas de buena voluntad: no abandonen nuestra amada Siria, no dejen que sea destruida y fragmentada", exbortó.
Además, mostró su confianza en que "la construcción de la paz, basada en la atención a los más pobres, se convierta en el pan de cada día de la humanidad y que la inspiración divina alcance a todas las religiones y creencias".
El Obispo Caldeo de Alepo señaló que "como cristianos orientales pertenecientes a países musulmanes y árabes de Oriente Medio, y compartiendo una extensa historia común de cultura, humanismo y de diálogo, no podemos estar ante ustedes en este momento memorable de la historia sin tener en nuestro corazón y en la conciencia los conflictos que nuestros hermanos y hermanas árabes y musulmanes están sufriendo".
"La guerra que estamos viviendo cada día en Siria, en Irak y en otros lugares de Oriente Medio nos convierte testigos de la destrucción de nuestra 'casa común', y de la muerte de personas inocentes y de los más pobres", dijo.
En su testimonio, Mons. Antoine Audo describió cómo "la mayor parte de los hospitales han quedado destruidos, y el 80 % de los médicos se han marchado de Alepo".
"En Siria, 3 millones de niños no tienen colegio. El deterioro físico y moral se puede leer en cada rostro. Es un deterioro que alcanza a todos, especialmente a los más pobres y, de entre ellos, a los niños, a los adolescentes y a los ancianos". "Las escuelas y las universidades sufren bombardeos casi a diario", denunció.
Además, tuvo palabras de esperanza al destacar cómo este acto ecuménico "nos da la fortaleza y la valentía necesarias para salir de esta grave crisis. De hecho, en Siria, de ahora en adelante, nuestro lema de servicio humanitario será 'Seamos cristianos juntos'".
"Para nosotros, -continuó- esto implica un proceso de conversión en Cristo, y el rechazo de cualquier reflejo de exclusión o de confinamiento en nuestras Iglesias orientales".
El Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, Cardenal Kurt Koch, y el Obispo luterano de Palestina y Presidente de la Federación Mundial Luterana, Dr. Munib Younan, rezaron juntos por la paz en Siria.
"Señor, Dios nuestro, Padre de toda la humanidad; cambia los corazones de todos los pueblos y de sus gobernantes, para que se pueda restaurar la paz entre las naciones sobre la base de la justicia, el amor y la virtud. Que el Espíritu de la paz descienda sobre el pueblo sitio y sobre nuestro mundo para que todos los conflictos ceses y la paz reine en la tierra", pidieron.
El Papa Francisco también dedicó unas palabras a los cristianos de Siria y recordó que Alepo es una "ciudad extenuada por la guerra, donde se desprecia y se pisotean incluso los derechos más fundamentales".
"En medio de tanta devastación, es verdaderamente heroico que permanezcan allí hombres y mujeres para prestar asistencia material y espiritual a quien tiene necesidad", resaltó.
Declaración conjunta
En el contexto del encuentro ecuménico, Caritas Internacionalis y su homóloga luterana LWF (Lutheran World Federation) firmaron una declaración conjunta. En ella ambas organizaciones declaran que "buscarán ampliar y profundizar sus relaciones y el trabajo conjunto en todos los niveles".
En concreto, se comprometen "a trabajar de forma conjunta y a nivel global en favor de los refugiados, desplazados internos y migrantes; a contribuir a la construcción de la paz y la reconciliación; a ofrecer una respuesta humanitaria adecuada ante las diferentes emergencias; a implementar los Objetivos de Desarrollo Sostenible; y a programar una acción interreligiosa".
#Aleppo #Siria 4 anno di war. Un siriano in fuga non è x fare villeggiatura in #Italia è x questo,ditelo a #Salvini. pic.twitter.com/d9QVC1D9WG
- Guido Cavalcanti (@SerieA_Calcio_1) 6 de septiembre de 2016
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