Giselle Vargas

Por Giselle Vargas

18 de octubre de 2016

Oct 18, 2016

El Obispo de Mar del Plata, Argentina, Mons. Antonio Marino y el Obispo Vicario Apostólico de Aysén, Chile, Mons. Luis Infanti, se pronunciaron tras el asesinato de dos menores de edad en dichos países.

En Mar del Plata, la joven de 16 años, Lucía Pérez, fue drogada, brutalmente golpeada, violada y asesinada entre el 8 y 9 de octubre. La justicia detuvo a dos presuntos autores de 23 y 41 años y un encubridor de 61.

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El mensaje "¿Dónde está tu hermano?" de Mons. Marino fue emitido el 16 de octubre. El Prelado escribió que "en medio de estos días de una inusitada violencia, crueldad y dolor quiero desde mi humilde lugar acompañar de corazón a las familias que están siendo víctimas del flagelo de las drogas y de la violencia".

"Hay adolescentes que son víctimas de la maldad indiscriminada del crimen organizado, del tráfico de estupefacientes y de la trata de personas", alertó.

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"Como sociedad tenemos que comprometernos a luchar por el bienestar de nuestros hijos dejando de lado sectarismos partidarios e intereses mezquinos (…) Hoy nuestra juventud está siendo severamente amenazada por estas plagas que solo serán vencidas si estamos unidos por vínculos fuertes entre todos los argentinos, si fortalecemos la familia y sus valores, si nos comprometemos con la misericordia y el amor y si llenamos la vida de sentido", afirmó el Prelado.

"No podemos dejar abandonados a nuestros niños y adolescentes, no podemos dejar solas a las personas que más sufren en tantas 'periferias existenciales', debemos reforzar el camino de la prevención".

Florencia Aguirre

De otro lado, en la ciudad de Coyhaique, en Chile, la comunidad está conmocionada tras la muerte de Florencia Aguirre. La menor de 10 años estuvo al cuidado de su padrastro Cristián Soto García, por algunas horas del pasado viernes.

Soto confesó que la asfixió y prendió fuego al cuerpo para luego dejarlo en el mismo domicilio donde vivían con su madre, ubicado en Coyhaique, sur del país. Él se encuentra en prisión preventiva y podría ser condenado a cadena perpetua.

El Obispo Vicario Apostólico de Aysén, Mons. Luis Infanti, emitió un sentido mensaje a la comunidad en el que dijo que "pareciera que el demonio anda suelto y no tiene frenos frente al machismo, al alcohol y a las drogas, a la pornografía, al desenfreno sexual, a la violencia intrafamiliar, social y de los medios de comunicación, a la injusticia, a la pobreza, a la falta de humanidad y de espiritualidad".

"La familia, lugar donde deberíamos aprender a amar, a dialogar serenamente, a perdonar, a respetarnos, a valorarnos, a corregirnos, a crecer, a orar, a forjar actitudes generosas, a sacrificarnos por los demás… es hoy un lugar de amenazas, de odio, de peligro y hasta de muerte".

"Florencia, angelito acogido en los brazos de Dios misericordioso, que después de esta dolorosa tortura de crucifixión, gozas de la paz y alegría eterna, golpea fuertemente nuestra conciencia y nuestra vida para que nunca más la violencia nos atrape y nos domine", expresó Mons. Infanti.

"Que el dolor, el sufrimiento, el llanto, la indignación frente a esta cruel muerte del angelito Florencia, Dios los transforme en un potente y decidido: Sí a la vida, sí al amor, sí a la justicia, sí a la paz, sí a la familia unida y feliz, sí a una sociedad fraterna y solidaria", concluyó el mensaje.

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Giselle Vargas
Giselle Vargas

Periodista, licenciada en Comunicación Social, Universidad del Desarrollo. Se ha especializado en comunicación eclesial. Se ha desempeñado como periodista en vicarías y proyectos del Arzobispado de Santiago y la Conferencia Episcopal de Chile. Respondiendo al llamado del Señor… en todo ‘Soli Deo Gloria’.