En este artículo presentamos 5 datos que todo católico debe saber sobre el Espíritu Santo para celebrar de la mejor manera la Solemnidad de Pentecostés, fiesta litúrgica que se celebra este domingo y pone fin al tiempo de Pascua.
Todos los años, 50 días después de la Resurrección de Jesucristo, los católicos celebramos Pentecostés para conmemorar la venida del Espíritu Santo sobre María y los apóstoles, que ocurrió después de la Ascensión de Cristo.
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La Biblia narra que con la venida del Espíritu Santo, los apóstoles recibieron dones especiales y se llenaron de aliento y fuerzas para salir a las calles de Jerusalén y proclamar la Buena Nueva a la humanidad.
Para prepararnos adecuadamente para esta fiesta litúrgica, te compartimos los 5 datos sobre el Espíritu Santo.
El Espíritu Santo es una persona
El Espíritu Santo no es una "cosa" o un "qué", el Espíritu Santo es un "Él" y un "quién". Él es la tercera persona de la Santísima Trinidad, y aunque pueda parecer más misterioso que el Padre y el Hijo, es tan persona como ellos.
El Espíritu Santo es Dios
Que el Espíritu Santo sea la "tercera persona de la Trinidad" no significa que sea inferior que el Padre o el Hijo. Las tres personas, incluyendo el Espíritu Santo, son totalmente Dios y "tienen una sola divinidad, gloria igual y coeterna majestad", como dice el Credo de Atanasio.
El Espíritu Santo siempre ha existido
Aunque aprendemos la mayoría de cosas sobre Dios Padre y el Espíritu Santo (así como de Dios Padre y el Hijo) en el Nuevo Testamento, Éste siempre ha existido. Dios existe eternamente en tres personas. Así que, cuando lea sobre Dios en el Antiguo Testamento, recuerde que se trata de las tres personas de la Trinidad, entre ellos el Espíritu Santo.
El Espíritu Santo se recibe por primera vez en el Bautismo
El Espíritu Santo puede estar activo en el mundo de formas misteriosas y que no siempre se comprenden. Sin embargo, una persona recibe el Espíritu Santo de una manera especial por primera vez en el Bautismo y luego es fortalecido en sus dones en la Confirmación.
Los cristianos son templos del Espíritu Santo
Los cristianos tienen al Espíritu Santo que habita en ellos de una manera especial, y por lo tanto, existen graves consecuencias morales, como explica San Pablo:
"Huyan de las relaciones sexuales prohibidas. Cualquier otro pecado que alguien cometa queda fuera de su cuerpo, pero el que tiene esas relaciones sexuales peca contra su propio cuerpo ¿No saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo que han recibido de Dios y que está en ustedes? Ya no se pertenecen a sí mismos. Ustedes han sido comprados a un precio muy alto; procuren, pues, que sus cuerpos sirvan a la gloria de Dios". (1 Cor 6:18-20)
Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en ChurchPop.