El Superior General del Sodalicio de Vida Cristiana, Alessandro Moroni, valoró el trabajo de la comisión independiente formada por iniciativa de esta institución para investigar casos de abusos y explicó que su informe final no se puede "tomar de manera total y absoluta".
El Sodalicio de Vida Cristiana es una sociedad de vida apostólica fundada en el Perú a la que pertenece el director de ACI Prensa, Alejandro Bermúdez.
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La Comisión de Ética para la Justicia y la Reconciliación se estableció por iniciativa del Sodalicio el 19 de noviembre de 2015 para responder a las acusaciones contra el fundador de la institución, Luis Fernando Figari, sobre abusos físicos, psicológicos y sexuales, que actualmente son investigados por el Vaticano.
El informe final publicado ayer recomienda al Sodalicio repudiar la conducta de Figari, pide la intervención de la Santa Sede y una reparación económica para las víctimas.
Hoy, en una extensa entrevista concedida al diario El Comercio, Moroni recordó que "fue iniciativa de nuestro consejo que se haya formado esa comisión independiente" y consideró que ha hecho una importante labor.
"El informe es valioso, pero refleja un ángulo de la realidad. No se le puede tomar de manera total y absoluta porque puede llevar a juicios generales que son inexactos", explicó Moroni.
Tras evaluar los testimonios, la Comisión hizo varias recomendaciones al Sodalicio entre las que figuran el repudio público a la conducta de Figari así como la mayor sanción moral e institucional; asistencia y compensación económica para las víctimas; e impedir ejercer cargos representativos a quienes tuvieron algún cargo en la organización del SCV durante los años en que se permitieron los abusos.
Como estaba previsto, el informe de la Comisión será enviado a la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica de la Santa Sede.
Los miembros de la Comisión consideran que el Vaticano debe "disponer con urgencia las medidas necesarias para que Luis Fernando Figari sea efectivamente sancionado por los actos denunciados, dentro de las competencias correspondientes a la justicia eclesiástica".
La Comisión también sugiere que la Santa Sede adopte drásticas medidas para intervenir al Sodalicio y que su conducción esté a cargo de personas ajenas a su actual estructura organizacional.
El 5 abril pasado, el Sodalicio reconoció culpable de abusos a su fundador, pidió perdón por las faltas y delitos de él o de cualquier otro miembro de la organización y anunció una reforma integral de la institución.
Moroni declaró a El Comercio que "yo pongo mi cargo a total disposición de la Santa Sede para que decida qué es lo mejor. Mi consejo superior y yo acataremos lo que se decida".
Asimismo, aseguró que el Papa Francisco está al tanto del caso. "Yo hablé con él. Me pidió esperar a que terminen las investigaciones por el caso. Se interesó personalmente. Creo que va a poner todos los medios para que se haga justicia", indicó.
Explicó que la Santa Sede podría "enviar a un comisario apostólico" y aclaró que "además del informe de la comisión, el diagnóstico debe ser completado con otros informes".
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- ACI Prensa (@aciprensa) 5 de abril de 2016